Con el 94% de los votos escrutados, Jair Bolsonaro ganó con el 55% de los votos. Será el 16º presidente militar de la historia brasileña y el tercero en llegar al poder por el voto directo.
Jair Bolsonaro será el próximo presidente de Brasil, a partir del 1° de enero de 2019. El candidato de derecha, que triunfó en casi todo el país,obtuvo el 56% de los votos contra el 44% de Fernando Haddad. Su campaña se basó en las denuncias contra la corrupción petista y la inseguridad. “Vamos juntos a cambiar el destino de Brasil”, aseguró tras confirmarse su victoria en el balotaje.
“Sabíamos para dónde estábamos yendo, ahora sabemos para dónde queremos ir, mi querido pueblo brasileño, muchas gracias por la confianza”, remarcó en sus primeras declaraciones como mandatario electo.
Bolsonaro reemplazará al actual presidente Michel Temer, quien deja el gobierno con un bajísimo nivel de aceptación.
El presidente electo sostuvo que su país no podía “seguir flirteando con el comunismo, socialismo, populismo y con el extremismo de la izquierda”, y que hará un Gobierno para colocar a la mayor economía de Sudamérica “en un lugar destacado”.
Haddad no felicitó al presidente electo ni hizo ninguna autocrítica por su derrota. En cambio, aseguró que su partido seguirá “llevando su mensaje a los rincones del país”.
“Tenemos una tarea enorme en el país, que es en nombre de la democracia. Defender el pensamiento, las libertades de los 45 millones que nos acompañaron hasta aquí”, afirmó el ex ministro de educación del gobierno de Lula da Silva. “Tenemos la responsabilidad de hacer uma oposición colocando el interés nacional por encima de todo”.
Bolsonaro, de 63 años, es diputado desde hace casi tres décadas y ha sido elegido presidente en representación del Partido Social Liberal (PSL), una formación minúscula hasta ahora, pero que en las legislativas del pasado 7 de octubre consiguió 52 de los 513 escaños en la Cámara de Diputados.
El presidente electo de Brasil ha prometido mano dura contra la delincuencia y permitir la venta de armas para civiles, así como ha anunciado una línea neoliberal en la economía, con privatizaciones y una fuerte disminución del tamaño del Estado.