El presidente reelecto de Venezuela renovó su cargo ante la presencia de escasos representantes de otros países. La Argentina y la OEA no reconocen su mandato
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, juró este jueves al mediodía un nuevo mandato, de seis años, ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), en medio de ovaciones de su partidarios y seguidores y ante la presencia de escasos representantes internacionales, ya que buena parte de la región no lo reconoce.
Contrariamente a lo que ordena la Constitución Bolivariana, la jura del mandatario se realizó frente al STJ dado que la Asamblea Nacional, con mayoría opositora, fue ilegalizada por el gobierno.
“Por el legado del pueblo, por Simón Bolívar, por nuestros pueblos originarios, por el legado del comandante Hugo Chávez, por los niños y las niñas de Venezuela”, juró Maduro su periodo 2019/2025. Y agregó: “no daré descanso a mi brazo ni reposo a mi alma”, en su tarea por el país.
Antes de la jura formal, el titular del TSJ, Maikel Moreno, fundamentó la decisión de que la ceremonia se haga ante ese cuerpo y no ante la Asamblea Nacional (Parlamento) como marca la Constitución.
Sólo cinco mandatarios asistieron a la ceremonia, en contraste con la declaración del denominado Grupo de Lima, que reúne a 13 de los 14 países de la región, que anticipó que no reconocerá el nuevo gobierno de Maduro.
Los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Nicaragua, Daniel Ortega; Cuba, Miguel Díaz-Canel; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; y de Osetia del Sur (un país no reconocido por Naciones Unidas), Anatoli Bibílov, fueron los jefes de Estado que presenciaron la ceremonia, junto a otra veintena de representantes internacionales.