El presidente oficializó el veto a la norma sancionada el 22 de agosto, que preveía recomposición salarial, aumento presupuestario y prioridad en insumos críticos para el sistema de salud infantil. El Gobierno argumentó falta de financiamiento y riesgos para la estabilidad fiscal
En medio de la cuenta regresiva para el vencimiento de los plazos, el presidente Javier Milei ratificó el veto a la Ley de Emergencia Sanitaria de la Salud Pediátrica N° 27.796, que había sido aprobada el 22 de agosto con 62 votos a favor y ocho rechazos en el Senado.
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La decisión se oficializó este jueves a la madrugada mediante el Decreto N° 651/2025, publicado en el Boletín Oficial. En su segundo artículo, el texto establece: “Devuélvase al H. CONGRESO DE LA NACIÓN el Proyecto de Ley mencionado en el artículo anterior”.
El proyecto contemplaba, por el plazo de un año, una recomposición salarial, aumento presupuestario y asignación prioritaria de insumos críticos. Sin embargo, desde el Ejecutivo consideraron que “el proyecto no solo carece de un financiamiento genuino, sino que posee una redacción ambigua que fomenta la arbitrariedad y la falta de claridad en los mecanismos de implementación”.
En la misma línea, advirtieron que la iniciativa “profundiza distorsiones salariales, compromete programas esenciales, erosiona la coparticipación federal y pone en jaque la estabilidad presupuestaria de la Nación y de las Provincias”.
De esta manera, la ley sancionada por el Congreso queda nuevamente en manos de ambas cámaras, que deberán resolver si insisten o no con su aprobación.
