Cinco de los ocho acusados fueron condenados a prisión perpetua, entre ellos Máximo Thomsen, quien se desmayó tras escuchar la sentencia.
Este lunes, 6 de febrero, se dio a conocer el veredicto en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años que fue asesinado a golpes en la vereda de un boliche de Villa Gesell en enero de 2020. Cinco de los ocho acusados fueron condenados a prisión perpetua, entre ellos Máximo Thomsen, quien se desmayó tras escuchar la sentencia.
“Todo es culpa de ustedes“, se escuchó decir en voz alta a Rosalía Zárate, la madre de Máximo Thomsen, cuando su hijo se descompensó en el recinto del Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores, lo que causó que se tuviese que detener la lectura del fallo.
“Esto es todo una mentira, saquen a todos los periodistas, la puta que los parió. Tres años torturándolo, No me importa más nada”, dijo a los gritos Rosalía Zárate, en medio de la sala de audiencias apenas vio a su hijo desvanecerse.
Thomsen, de 23 años, fue declarado como uno de los cinco “coautores” del delito de “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”.
Si bien los ocho acusados estuvieron de pie en el momento de la lectura de la sentencia, tras escuchar la condena, Thomsen se sentó en su asiento y ya dio síntomas de haberse descompuesto, lo que fue advertido por su madre.