El cuerpo fue encontrado con un corte en el cuello, golpeado y maniatado en una vivienda de El Calafate. Uno de los detenidos se quebró y confesó.
El cuerpo sin vida de Fabián Gutiérrez, el ex secretario privado de la vicepresidenta, Cristina Kirchner, fue hallado sin vida hoy en la ciudad santacruceña de El Calafate, tras haber sido torturado y asesinado por un grupo de jóvenes, dos de ellos nietos de un reconocido escribano de la ciudad y otros dos parientes del actual intendente.
La principal hipótesis es que fue asesinado por cuestiones personales o robo, desestimando vinculación política.
El cadáver del ex funcionario, uno de los arrepentidos en la causa de los cuadernos, fue hallado enterrado y envuelto en una sábana en una vivienda del barrio Aeropuerto Viejo del distrito patagónico. Además estaba precintado, con signos de haber sido golpeado y presentaba un corte en el cuello.
Según publicó La Opinión Austral, los tres jóvenes detenidos confesaron haber maniatado y torturado a Gutiérrez: uno de ellos había sido visto con la víctima el último jueves.
De acuerdo a la información que trascendió, los acusados le habrían exigido “números de cuenta y plata en efectivo”.
La muerte habría sido ocasionada por un profundo corte en el cuello, realizado por un joven llamado Facundo Zaeta.
Dos de los detenidos son nietos de Oscar Zaeta, de 71 años, el más tradicional escribano de la localidad.
Otros dos son hijos de Martín Gómez, hijo a su vez de Oscar Gómez, un ex intendente y primo segundo del actual intendente, Héctor Javier Belloni, que el año pasado lo integró al “Ente Mixto de Turismo” de la localidad, informó Infobae.
Leer más: Quién era Fabián Gutiérrez, el ex secretario que se convirtió en millonario
Sos todos de jóvenes de alrededor de 20 años, uno de los cuales habría tenido relaciones de tipo afectivo con Gutiérrez.
Fabián Gutiérrez, quien ofició como secretario privado de Cristina Kirchner hasta 2010, estaba desaparecido desde el pasado jueves y en la noche del viernes el juez que investiga el caso, Carlos Narvarte, ya había admitido que los operativos de la Policía de Santa Cruz apuntaban a la búsqueda del cuerpo: al ingresar a la casa del ex funcionario habían encontrado manchas de sangre y signos de violencia.
Dos días antes de ser visto por última vez, la víctima había regresado a El Calafate proveniente de la Ciudad de Buenos Aires: al momento de su desaparición se encontraba cumpliendo la cuarentena obligatoria en el marco de la pandemia de coronavirus.