El presidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios privados de Santa Fe dialogó con SOL 91.5 sobre la situación de los sanatorios privados en el marco de la pandemia de coronavirus.
Este martes el Doctor Carlos Abraham, presidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios privados de Santa Fe, dialogó con el programa Un Día Perfecto de SOL 91.5 sobre la situación en el sector privado de la ciudad con la llegada de la segunda ola de coronavirus.
“El sector privado de salud tiene una capacidad limitada de camas de cuidados intensivos que es lo que está siendo saturado en este momento, no son camas de internación común general sobre las que no tenemos problemas“, comenzó diciendo Abraham.
En ese sentido, explicó que “la cama crítica es mucho más que una cama. Es una cama más todo el equipamiento que necesita, más el personal idóneo para asistir a la persona que la ocupa. Hoy sería el cuello de botella que tenemos en toda la Argentina y en Santa Fe también lo estamos teniendo“.
“En el sector privado la ocupación es plena, osea no tenemos capacidad receptiva en este momento y estamos trabajando en coordinación con autoridades del ministerio de manera permanente y con los directores de hospital para ir reubicando los pacientes tanto con o sin cobertura. Se ubica en base a la disponibilidad“, detalló.
“Estamos al límite, con la ocupación plena“, aseguró Abraham y advirtió: “Que el sector de salud esté alerta es insuficiente si la conducta y la responsabilidad social sigue siendo prácticamente nula. Creo que con el correr de los días nos vamos a ver imposibilitados de darle la atención que necesite a mucha gente“.
“Durante el fin de semana estuvimos todo el tiempo reubicando pacientes. Dividimos patologías Covid y no Covid. No damos a basto, en la tarea de ir organizando uno ve a su al rededor un nivel de inconciencia muy alto“, manifestó e indicó que “no es un tema de cama, de espacio físico, es un tema de recurso humano. Nuestro problema no son las camas, nuestro problema es la gente capacitada, entrenada en atender al que ocupa esa cama“.
“El año pasado teníamos problemas con los respiradores, con los barbijos, con la ropa. Todo eso está subsanado. Hoy lo que tenemos es escases de personas idóneas para cumplir esa labor. Estamos desbordados. La explicación es que el sistema estaba preparado para atender la patología normal y no esta pandemia“.