Lo dijeron los fiscales que ordenaron detener al ex diputado Darío Scataglini, acusado de utilizar sus influencias para favorecer a una organización dedicada a esa actividad
Los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra brindaron una conferencia de prensa por la reciente imputación contra el ex diputado Darío Scataglini por tráfico de influencias y negociaciones incompatibles con la función pública. Lo acusan de ser el eslabón político de una organización dedicada al juego clandestino. “La investigación avanza a paso muy firme, demuestra que hay núcleos de poder históricamente no tocados en esta provincia y están empezando a verse seriamente afectados“, dijeron los fiscales.
El ex diputado provincial por el Partido Justicialista Darío Scataglini fue imputado el sábado acusado de contribuir desde sus influencias políticas a una organización dedicada al juego clandestino. La jueza Eleonora Verón le impuso libertad con restricciones y le tomó como fianza la vivienda en la que vive, cotizada en 41 millones de pesos.
El delito atribuido por los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos es tráfico de influencias y negociaciones incompatibles con la función pública. Lo acusan de haber negociado para que la Lotería de la provincia de Santa Fe le otorgara a la empresa Wildar Gaming SRL, cuyo titular es el imputado Leonardo Peiti, la explotación de máquinas para apuestas online en salas habilitadas. Scataglini, siendo asesor parlamentario de la Cámara de Diputados, influyó para que se beneficiara a Peiti y al senador provincial Armando Traferri.
La evidencia más relevante, según los fiscales, surge del teléfono de José Fernández Chemes, ex secretario Legal y Técnico de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez. “En ese teléfono está toda la negociación ilegal que se hizo tratando Scataglini y Traferri de influir como funcionarios públicos para que se habilite el juego legal a Peiti”, explicó el fiscal Edery durante la conferencia.
En ese sentido remarcó que hubo una reunión en las oficinas de Traferri en San Lorenzo, de la que participaron Peiti, Fernández Chémes, Traferri y Scataglini. “A partir de la cual se empezó a buscar de qué manera se le iba a intentar habilitar el juego legal a Peiti”, sostuvo Edery.
Participación directa
“Scataglini formó parte de la comisión de Bingos y Casinos que se generó hace un par de años cuando él era diputado. No solo tenía conocimiento en la materia sino también contactos con las personas que habilitaban”, se explayó Edery. En esa línea consideró que el ex diputado tenía “participación directa” en la organización.
Para el fiscal la investigación “demuestra cómo funciona en algunos aspectos la administración pública de la provincia, con muchas cuestiones a través de favores y contactos”. “Todos creemos que cuando uno intenta acceder a un contrato público se está tratando de negociar y hay una igualdad entre las partes. Lo que se demuestra acá es que si uno tiene un contacto político esa igualdad desaparece“, agregó Edery.
“Imputación al estamento político”
El fiscal Luis Schiappa Pietra destacó el cumplimiento de “las obligaciones del Estado argentino de investigar corrupción”. “Lo que está en juego en estas imputaciones al estamento político son esos compromisos que estamos tratando de cumplimentar”, agregó.
En ese sentido remarcó: “Es una imputación al estamento político de esta organización. Está muy en evidencia el nivel de compromiso de ese estamento político”. “La investigación avanza a paso muy firme, demuestra que hay núcleos de poder históricamente no tocados en esta provincia y están empezando a verse seriamente afectados”, indicó el fiscal. “Quedó claro que hay una forma de administrar la provincia, una forma de hacer política efectivamente comprometida con maniobras delictivas”, insistió Schiappa Pietra.
Fuente: La Capital