Diputados avanza en un protocolo para prevenir y atender violencias de género

Diputados avanza en un protocolo para prevenir y atender violencias de género

La iniciativa de la legisladora Erica Hynes acompañada por once de sus pares busca prevenir y sancionar situaciones de violencia y discriminación basadas en el sexo, género, orientación sexual o identidad de género en el ámbito de la Cámara de Diputados.

Erica Hynes, diputada socialista.

La Cámara de Diputadas y Diputados de Santa Fe avanza en la puesta en marcha de un protocolo para la prevención y atención de situaciones de violencia y discriminación basadas en el sexo, género, orientación sexual o identidad de género que ocurran en el ámbito de la legislatura provincial.

Se trata de una iniciativa presentada por la socialista Erica Hynes que lleva la firma de otras once legisladoras y que fue ingresada el año pasado después del quinto aniversario del movimiento #NiUnaMenos. La resolución fue aprobada por amplia mayoría durante la sesión del 24 de junio, con el voto negativo del bloque Somos vida y familia.

“El proyecto que convertimos en resolución es una herramienta para que nuestra cámara sea un lugar libre de violencias basadas en el sexo y el género”, indicó Hynes. “Los protocolos son instrumentos relativamente nuevos que demostraron ser más útiles que los sumarios, las denuncias formales y los procesos administrativos, porque tienen espacios que prevén la escucha y confidencialidad, y se comprometen a acompañar a las personas”.

La diputada destacó que con este tipo de medidas no se terminan mágicamente los problemas de violencia, pero se plasma la decisión de visibilizarlos, prevenirlos y atenderlos cuando sucedan. “Con la aprobación damos un mensaje claro: para esta comunidad los comportamientos violentos no son aceptables”.

Alcance y funcionamiento

El protocolo se aplicará a todas las personas que integran la Cámara de Diputadas y Diputados de Santa Fe, incluso a las que presten servicios de manera ocasional y tendrá alcance sobre hechos ocurridos en las dependencias de la Cámara o los que hayan ocurrido fuera de ese espacio, pero en el ejercicio de funciones vinculadas a las tareas legislativas, incluyendo a través de medios electrónicos o virtuales.

Además de la violencia física, la nueva herramienta comprende situaciones de violencia psicológica, sexual, económica y patrimonial, simbólica y política. A su vez, tiene como principios rectores la no revictimización, el respeto y resguardo de la intimidad, la contención y el acompañamiento, asesoramiento gratuito, discreción, confidencialidad y celeridad a fin de dar una respuesta oportuna.

Para la recepción de las consultas y presentaciones, la resolución prevé la creación de una comisión especial, cuya integración será dispuesta por el presidente de la Cámara, que tendrá la función recibir los aportes de testigos, emitir opinión no vinculante acerca del curso a seguir en cada expediente, y elevar las actuaciones a la Presidencia.

“Tenemos el desafío de hacer de este protocolo una herramienta útil, que nos permita construir una Cámara todavía más solidaria, todavía más democrática, todavía más igualitaria y eso mejorará a la política y mejorará a la democracia”, concluyó.