Francisco Adorni, hermano del vocero presidencial, acaba de ser nombrado como asesor del Ministerio de Defensa en medio de un fuerte ajuste en el sector público.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, es uno de los principales impulsores de la narrativa de “no hay plata”, el leit motiv de Javier Milei para el fuerte ajuste que está impactando en el poder adquisitivo de sueldos y jubilaciones, y en especial en las contrataciones en el Estado. Pese a eso, según se informó, su hermano cobraría a partir de ahora la friolera de 2,6 millones de pesos por mes.
El propio vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó que se trata de su hermano pero adujo que trabaja en el Estado desde hace décadas y que desde entonces viene ocupando cargos en distintas dependencias oficiales y que no tuvo nada que ver con su designación en el citado ministerio.
Como sea, su hermano Francisco desde este 1° de febrero pasó a desempeñarse como asesor de las conducción de Defensa, a cargo del radical Luis Petri. En la normativa que lo oficializa se sostiene que “se deja constancia que se procedió a incorporar a las actuaciones la documentación exigida por la Circular SLyT., N° 4/02, copia de DNI, título, CV firmado, Declaraciones Juradas de Incompatibilidades debidamente suscriptas, y certificado de antecedentes penales (v. orden N° 3 a 9). Del mismo modo, se destaca que se encuentra en proceso de tramitación el Certificado de Aptitud Psicofísica, los que se incorporarán dentro de los TREINTA (30) días de firmada la mencionada Resolución”.
En un contexto en el que prima el malestar interno por la decisión del ministerio de no aprobar el pago de las últimas dos cuotas de la jerarquización salarial del personal de las Fuerzas Armadas, un 10% de aumento pagaderos en febrero y abril por afuera de cualquier incremento paritario, este nombramiento causó singular sorpresa entre el personal civil y militar de la cartera. “Tiene un mayor sueldo que un jefe de estado mayor”, se quejó, a su turno, un oficial consultado.
Y aún persiste el sinsabor entre el personal histórico del Edificio Libertador por el recorte en horas extras que, argumenta, ha provocado, por ejemplo, que no haya mozos por la tarde en varios pisos de esa histórica sede ministerial. “Bajaron la jerarquización y las horas extras y ahora le dan a un asesor 5 mil unidades retributivas que muchas veces se usan para pagar estos adicionales”, explicó, a su turno, otra fuente castrense consultada.