El presidente y Juliana Awada hablaron durante veinte minutos con sus seguidores de la red social. El mandatario se emocionó cuando le hicieron una consulta.
El presidente Mauricio Macri, a pocos días de terminar su mandato, eligió un vivo de Instagram para conversar con los usuarios de la red social. Para sorpresa de todos, lo acompañó la primera dama Juliana Awada.
La cita era a las 14:30, cuando había prometido responder preguntas que fueron llegando en la semana. Aprovechó para referirse a temas de actualidad política como la renuncia del secretario de salud Adolfo Rubinstein en relación a la derogación del protocolo de actuación para casos de interrupción legal del embarazo, para hablar de cómo será su rol como opositor y también para contar algunos detalles de su intimidad.
Cuando le preguntaron sobre su gobierno, respondió que “fueron años muy intensos”, y siguió: “Necesito tiempo para hacer un análisis más profundo y ver qué cosas podemos mejorar y transmitirlas para que todos sigamos mejorando”.
Más adelante, dijo que tenía “ansiedad de que se acelere el tiempo para poder mirar todo con perspectiva”. Por su parte, Juliana se animó a poner en palabras sus impresiones: “Muchas cosas cambiaron. Mauricio y su equipo demostraron que hay otra manera de hacer política desde el respeto, desde la honestidad y especialmente desde los valores”.
Se refirió a la crisis como el peor momento de su vida más allá del secuestro: “Fue un vértigo especialmente desde abril que empezó la crisis. Fue muy difícil para todos”.
En cuanto a su rol después de diciembre, repitió que ya se ha comprometido a ayudar a coordinar que todos los argentinos sigan unidos. Aclaró también que Miguen Ángel Pichetto seguirá en Juntos por el Cambio, “está más convencido que nunca”.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando le preguntaron qué iba a extrañar de ser presidente. Con los ojos llorosos, le cedió la palabra a su esposa que aclaró “se emocionó”, y le habló primero a él: “Vas a seguir, vas a estar en contacto con todos”.
Al final de la transmisión, también volvió a emocionarse cuando dijo: “Hoy hay un grupo consolidado de 40% de los argentinos que está dispuesto a ayudar pero también a poner límites”.
Sobre el futuro, agregó: “No es verdad que el 10 de diciembre quedamos sin futuro. Es una gran oportunidad para el país y para el kirchnerismo, para inaugurar otra etapa con vocación de diálogo, tolerancia e integración”.
