La Vicepresidenta le atribuyó la decadencia económica al liberalismo de los 90, no realizó un fuerte apoyo hacia el candidato presidencial del oficialismo y justificó la inflación en los condicionamientos del FMI.
“No es para reír, es para llorar. En junio del año pasado, huyó del Ministerio” fueron las palabras de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner cuando desde el público le preguntaron por el exministro de Economía, Martín Guzmán.
Tras un período sin hablar en público, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner presentó la reedición del libro “Después del derrumbe. Conversaciones de Torcuato Di Tella y Néstor Kirchner” en la sede de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) de Ciudad de Buenos Aires.
Aprovechó la disertación para criticar al presidente Alberto Fernández por el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) -junto a sus ministros- y para señalar que no habló luego de que Unión por la Patria quedara tercera en las elecciones PASO porque “ya había dicho el resultado antes”.
En el acto, habló más del pasado que del presente. Detalló las medidas económicas tomadas desde el comienzo de José Martínez de Hoz a cargo del Ministerio de Economía en 1976 hasta la crisis del 2001.
En esa línea, le atribuyó el derrumbe económico al modelo neoliberal y cargó contra las funciones de los economistas Domingo Cavallo y Carlos Melconian en ese período. Manifestó que el primero “estaba en el Banco Central y es el que estatizó la deuda de las empresas” y que el segundo “estatizó la deuda en dólares”.
En torno a la campaña del oficialismo, no emitió un pronunciamiento contundente hacia su candidato, el ministro de Economía, Sergio Massa. Sólo le valoró “haber dicho la verdad sobre lo que impone el FMI en relación a la devaluación”, sin destacar las medidas recientes del tigrense ni habló sobre sus propuestas.
Es así que justificó la escalada inflacionaria en los lineamientos del acuerdo con el organismo de financiamiento: “Son las condiciones que ponen y así aumentan los precios. Estaba prohibida la moratoria previsional y sapos y culebras se echaron sobre el plan de pago que planteamos en el Congreso”.
“El problema es el alto endeudamiento de la Argentina, la auditoría del FMI y las recetas económica equivocadas. El problema no es el déficit. El fondo impone planes muy inconsistentes para la Argentina pero puede ser consistente para quedarse con nuestros recursos naturales”, amplió.
En torno a las elecciones PASO, Cristina Kirchner señaló: “Hace tiempo que vengo leyendo notas que dicen que no hablo del resultado elecciones, que si apoyo a Massa o no. ¿Qué iba a decir el día si ya había dicho el resultado de las PASO antes? En mayo fue que hablé del escenario de tercios”.
“Todos decían que el ganador de la interna de Juntos por el Cambio sería el próximo presidente. En mayo, dije que lo importante iba a ser el piso y no el techo. Los competidores ahora son Milei y Massa. Se dio lo que previmos”, agregó.
Sobre la victoria del candidato presidencial de La Libertad Avanza con el 30,04% en las PASO, aseguró que “no hay izquierda o derecha. Querer vivir bien no es de derecha. Querer tener un buen trabajo, un buen sueldo y la posibilidad de acceder a la vivienda no es de derecha o de izquierda, te diría que es casi de peronistas”.
“No se entiende la presencia de una tercera fuerza. La gente es más racional de lo que se pretende. Las emociones tienen una razón, sino estás desquiciado. El otro día escuchaba que decían que no apoyaba a Massa. Fui una de las impulsoras de que no hubiera PASO y de que hubiera lista de unidad”, agregó.