El abogado contó que durante el juicio pudieron demostrar que el grupo tenía un modus operandi “aceitado” por la cantidad de veces que se habían peleado” y explicó que “con un instante” les alcanzaba para organizarse para atacar.
El abogado que representa a la familia de Fernando Báez Sosa, Fernando Burlando, sostuvo que los 8 acusados del crimen “no cambiaron su actitud ni aprendieron nada en la cárcel” y contó que no les creyó el pedido de disculpas que realizaron en el juicio durante sus últimas palabras.
“En tres años de detención lo más noble que hicieron fue decirle al fiscal que no se gaste en preguntar porque no iba a contestar. Usaron el silencio hasta el final y a lo último intentaron pedir disculpas. No entendía nada de lo que hizo su defensa”, manifestó Burlando en una entrevista exclusiva con Jorge Rial en Argenzuela.
En ese sentido, el abogado indicó que cuando los acusados pidieron perdón no pudieron nombrar a Fernando ni mirar a la cara a los padres de la víctima. “No pudieron hacerlo por cobardía. Es la misma cobardía que tuvieron cuando lo golpearon entre 8”, señaló.
Acto seguido, Burlando contó que durante el juicio pudieron demostrar que el grupo tenía un modus operandi “aceitado” por la cantidad de veces que se habían peleado y explicó que “con un instante” les alcanzaba para organizarse para atacar. “Estos chicos le han hecho bullying y han golpeado a mucha gente. La escalada de violencia iba escalando”, aseveró.
Luego sostuvo que los acusados no tuvieron “ni siquiera códigos entre ellos” para mejorar la condición de los que tuvieron menos responsabilidad en el hecho. “No lo hicieron porque son todos la misma porquería”.
Por último, como pidieron en el juicio, el abogado pidió cadena perpetua por tratarse de un delito de homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de 2 o más personas y alevosía y adelantó que si quedan conformes con el veredicto del próximo 6 de febrero van a “pelear” hasta que se haga justicia.
