El ministro de Seguridad elogió a Massa como presidenciable de Unión por la Patria. Además, desmintió a Cristina Kirchner y aseguró que Tolosa Paz “no tuvo nada que ver” en el arreglo del cierre de listas.
Fiel a su estilo, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, analizó esta mañana el panorama en Unión por la Patria y elogió a Sergio Massa, ungido como presidenciable del oficialismo. Sin embargo, no hizo lo mismo con su par del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, que tuvo que declinar su candidatura. Es que, según planteó el funcionario, al alfil de La Cámpora “le faltan un montón de hervores” si quiere llegar a la Casa Rosada. Sin sintonía con los miembros de esa organización, también apuntó al diputado nacional Máximo Kirchner, a quien describió con una milonga para plasmar que no representa lo mismo que sus padres.
Convencido de que va a militar la candidatura de Massa, Fernández planteó que el ministro de Economía era mejor postulante que el del Interior. “No le quiero quitar méritos a Wado, pero le falta mucho”, consideró en Radio 10. Lo contrastó entonces con el dirigente del PSOE español Felipe González y recordó que cuando el expresidente entró al Palacio de La Moncloa por primera vez tenía 41 años, aunque marcó: “Pero era Felipe González, no es Wado. No se compara ni por casualidad y lo digo con todo respeto”.
En cuanto al ministro kirchnerista, que tiene 46, siguió: “Yo no le quito méritos, que arme su carrera y de acá a 15 o 20 años a lo mejor es candidato, a lo mejor es presidente y es el mejor presidente; pero hoy le faltan un montón de hervores. Es mi visión, no quiero faltar el respeto”.
Mientras, y una vez más, volvió a dirigir sus dardos contra el hijo de la vicepresidenta. “Dice una milonga de José Larralde: ‘Hasta parece mentira, pero es cosa señalada, que de una sangre pareja, salga la cría cambiada’”, recitó Fernández la canción Cosas que pasan y, para explicar su referencia, indicó con ironía: “No quiere decir ni que sea malo, ni cosa por el estilo. El padre y la madre son una cosa… Nada más, hasta ahí llego”.
No obstante siguió. Dijo que no ve la herencia de Néstor y de Cristina Kirchner en Máximo, aunque aclaró que eso no significa que el líder de La Cámpora no sea un buen legislador. “No le quito mérito, pero no es aquel Néstor Kirchner que era absolutamente querible y realmente 24 horas por día respiraba política. No veo que sea eso”, enfatizó sobre el diputado nacional. Asimismo, deslizó que Máximo Kirchner está “peleado” con Andrés “Cuervo” Larroque, que fue secretario general de La Cámpora y ahora armó su propia organización, La Patria es el Otro.
Dijo incluso el funcionario que el hijo de la vicepresidenta nunca hubiera intentado sumar a su madre a la campaña bonaerense si no hubiese sido autorizado por ella. “Máximo no diría eso si Cristina no le dijo que sí. Es Cristina la que está diciendo que quiere participar. [Cristina] va a participar porque es su forma de ser, su política, es la sangre que le hierve. Va a tratar de meterse en eso”, sostuvo el ministro de Seguridad luego de que el hijo de la exmandataria preguntara a la militancia el fin de semana en Hurlingham si querían que su madre se involucrara en este tramo de las elecciones.
En tanto, Fernández negó que la vicepresidenta haya tenido razón cuando atacó a la titular de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, por primero abrirle una interna a Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires y después arreglar un lugar en la lista de diputados nacionales, cuando se acordó la fórmula de unidad Sergio Massa-Agustín Rossi.
Dijo el ministro que Tolosa Paz “a lo mejor tiene razón” en disgustarse con Cristina Kirchner porque fue “innecesario” lo que planteó la expresidenta en un acto en Aeroparque. “Lo que dice [Cristina] no es verdad. En la reunión que Santiago [Cafiero] comenta los acuerdos que se estaban haciendo había siete personas: Daniel [Scioli], su hija [Lorena], Pepe [Albistur], Victoria, Santiago, Alberto Pérez y yo. No me cuentan lo que sucedió”, sostuvo el ministro de Seguridad, quien aseguró que Tolosa Paz “no tuvo absolutamente nada que ver” en el armado final que negociaron desde el ala albertista.
Vocero informal de la Casa Rosada, sobre todo en los mensajes para la interna, Aníbal Fernández volvió a defender al Presidente este lunes. “La gestión es muy buena. Que no se haya podido cumplir con el tema de la inflación no significa que no haya sido buena gestión. Basta con mirar los índices, los que quieran, y se van a dar cuenta”, consideró.