Rodolfo Roselli, director de la regional de Salud Santa Fe, dialogó con Sol Play sobre el brote de casos de dengue y chikunguña en la ciudad.
En la última semana se confirmaron 171 casos de dengue en la ciudad de Santa Fe, más de la mitad de ellos con epicentro en barrio Sargento Cabral, y cinco nuevos casos positivos de chikunguña en Alto Verde.
En diálogo con Sol Play, Rodolfo Roselli, director de la regional de Salud Santa Fe, se refirió a la actual situación en la capital de la provincia ante el brote de dichas enfermedades.
“Se ha estado trabajando y se sigue haciendo con acciones de bloqueo. Solicitamos a la población en general que nos permitan el ingreso al domicilio, para realizar acciones de prevención”, sentenció.
En este sentido, Roselli informó que las tareas preventivas se llevan a cabo en conjunto por los municipios y comunas, encargados de la fumigación intra y peri domiciliaria, mientras que el Ministerio de Salud se dedica a trabajar en la detección de casos sospechosos.
Sobre el accionar, el especialista explicó que cuando se detecta un caso sospechoso, se trabaja en torno a 4 o 9 manzanas que rodean ese domicilio, con controles sintomáticos y controles en los patios: “Necesitamos trabajar en el orden de los patios, para buscar si hay recipientes con agua, y así vaciarlos. Esos recipientes con agua estancada desde hace mucho tiempo, a la sombra, son ideales para el crecimiento del mosquito transmisor”.
En la misma línea, Roselli aclaró que no hay diferencia entre el dengue y la chikunguña, dos virus que desatan la misma sintomatología: “Los más comunes son fiebre, dolor de cabeza retro ocular, dolores musculares y articulares muy intensos, erupciones cutáneas o enrojecimiento de la piel, y a veces, gastroenteritis”.
Sobre el brote en barrio Alto Verde que se dio a conocer este lunes, el funcionario dijo que se está trabajando y que “no sería de extrañar que mañana aparezcan entre 15 o 20 nuevos casos confirmados”.
Además, hizo hincapié que los santafesinos tomen medidas de cuidado: “Tienen que cuidarse de que lo pique el mosquito ya infectado o sospechoso. Tienen que usar repelente”.
“Hay que ocuparse, hay que acceder a las indicaciones, pedidos y protocolos. Con el frío esto va a desaparecer, pero hasta entonces tenemos que tener la menor cantidad de casos posibles”, sentenció.
