Desde enero hasta la fecha, se pusieron a resguardo desde un ciervo axis hasta yacarés y carpinchos.
La Municipalidad informó que a través del trabajo del Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa) y en conjunto con asociaciones proteccionistas, el Cobem y la Policía Ecológica, se logró el rescate de 86 animales no domésticos pertenecientes a 15 diferentes especies, entre enero y julio de este año.
Entre las especies rescatadas se contabilizan tortugas, lechuzas de campanario, monos carayá, ñandúes, cacatúas, loros habladores, carpinchos, búhos, iguanas, lagartos, yacarés, víboras, ciervos axis, conejos y aguará guazú, entre otras, encontrados en diferentes puntos de la ciudad. En todos los casos se evaluó la situación y se optó por el procedimiento adecuado que asegure el respeto por cada animal.
Una vez que el personal de la Municipalidad los pone bajo resguardo, en algunos casos son trasladados a la Granja La Esmeralda. En tanto, en otros, son liberados en su hábitat natural, post evaluación del estado de salud.
No obstante, en algunos casos se observa que el animal ya está tan domesticado que no sobreviviría en un entorno natural. En esas situaciones, se lo ubica en espacios pertenecientes a asociaciones, organizaciones o particulares que los conservan bajo guarda judicial.
Hallazgos
Los animales rescatados provienen de decomisos y rescates realizados por personal de Imusa, el Cobem u otras autoridades ambientales.
Generalmente atravesaron situaciones estresantes como el cautiverio o el comercio ilegal, aunque también hay algunos que eran utilizados como mascotas, mantenidos fuera de su hábitat natural. También están aquellos que por accidentes o actividades humanas como la destrucción de su hábitat natural o la caza, son encontrados en condiciones en las que no pueden valerse por sí mismos.
Vale mencionar que, en buena medida, los casos son abordados gracias al Sistema de Atención Ciudadana. Por eso, es tan importante la comunicación inmediata a la línea municipal 0800 777 5000, ante cualquier aparición de fauna silvestre en el ejido urbano.
Una vez en contacto con el operador, se deberá informar el lugar preciso donde ocurre esa situación, de modo que personal especializado pueda acercarse con celeridad. A partir de ese momento, se realiza la inspección para verificar la situación y se interviene, en caso de ser necesario, en conjunto con otros actores.
Mientras se aguarda la llegada del personal, es importante no tocar al animal y dejar que permanezca en un lugar tranquilo, a la espera de los agentes capacitados para el abordaje. La captura se realizará siempre priorizando siempre el resguardo y la integridad de las personas, pero evitando un daño físico a la especie en cuestión.
Cabe recordar, que se entiende por fauna silvestre a aquellos animales que no pertenecen a especies domesticadas por el hombre. Por ende, quedan excluidos de esta calificación perros, gatos y animales de granja tales como vacas, caballos, aves de corral, ovejas, cabras, cerdos, etc.