Los cancilleres de ambas naciones se reunieron en Antalya, Turquía; acordaron “proseguir las negociaciones en este formato”.
Tras casi dos horas de conversaciones en Turquía, el canciller de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo que “no hay avances significativos en el alto el fuego”. Antes de llegar a la reunión, el funcionario había dicho no tener “muchas expectativas” de avanzar en la resolución del conflicto bélico desatado hace dos semanas.
Fue la primera reunión entre los cancilleres de ambas naciones desde que el presidente Vladímir Putin lanzara la ofensiva contra Ucrania. El encuentro tuvo lugar en Antalya, en el sur de Turquía.
“Queríamos obtener un alto el fuego de 24 horas. Lavrov dijo que Moscú quería hablar de corredores humanitario”, dijo Kuleba, a la espera de que se abra una salida segura para evacuar la ciudad de Mariúpol, en el sureste de Ucrania, bajo intensos bombardeos rusos que incluso tuvieron como epicentro un hospital pediátrico.
”Vine aquí por razones humanitarias, para la evacuación de civiles, pero Lavrov no quiso prometer nada sobre este punto”, señaló, en ese sentido.
El ministro de Relaciones Exteriores recalcó que Ucrania “no se ha rendido, no se rinde y no se rendirá”.
Si bien no hubo avances, Kuleba informó que acordaron con su par ruso “proseguir las negociaciones en este formato”.
Serguéi Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores ruso, confirmó que siguen dispuestos a discutir las “garantías de seguridad en Ucrania” y señaló: “Queremos que Ucrania sea un país neutral. No nos oponemos a la ampliación de la OTAN”.
Por otra parte, afirmó que los países que envían armamento a Ucrania están actuando “peligrosamente”. “Aquellos que envían armas a Ucrania son responsables de sus acciones. Aquellos que alientan a los combatientes contratados también serán responsables de esto”, sostuvo.
