Aseguró tener un doctorado en la Universidad Nacional de Rosario pero su rector lo desmintió. Luego se sumó la Fundación Getulio Vargas y Universidad de Wuppertal.
La designación de Carlos Decotelli al frente del Ministerio de Educación de Brasil se convirtió en un nuevo escándalo para Jair Bolsonaro a las pocas horas de su oficialización cuando diferentes universidades salieron a desmentir públicamente los antecedentes académicos que el funcionario había incluido en su currículum vitae.
En su historial, Decotelli afirmaba ser licenciado en Ciencias Económicas de la UERJ, la universidad de Río de Janeiro, tener una maestría de la Fundación Getulio Vargas, un doctorado en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y un posdoctorado en la Universidad de Wuppertal, de Alemania.
Los títulos del nuevo ministro habían sido destacados por el propio Bolsonaro en la presentación pública a través de su cuenta de Twitter. Sin embargo, a las pocas horas, las autoridades de las unidades académicas salieron a refutar la información.
A la refutación de la UNR, se conoció una denuncia por plagio en la Fundación Getulio Vargas donde Decotelli copió al menos cuatro extractos de otros trabajos en su maestría presentada en 2008, según publicó la periodista de Brasilia, Constança Rezende.
También desde Alemania, la Universidad de Wuppertal desdijo al ahora ex ministro quien aseguraba contar con un posdoctorado en dicha institución. Es que en su currículum, Decotelli afirmaba haber realizado un postdoctorado entre 2015 y 2017 pero la universidad aclaró que solo pasó tres meses en 2016.
El escándalo llegó al punto tal que Carlos Decotelli debió entregar este martes su dimisión al presidente Jair Bolsonaro a los cinco días de haber sido designado. Además, la tensión irradió hacia adentro del oficialismo ya que el ex funcionario había sido propuesto por el ala dura del militarismo bolsonarista.
