El presidente saliente de EEUU, que había prometido durante la campaña electoral que no haría uso de este poder presidencial para eximir a su hijo de la cárcel, dice que este es víctima de una persecución política
El presidente saliente de EEUU, Joe Biden, anunció el domingo que concederá un indulto oficial a su hijo, Hunter Biden, que se enfrentaba a condenas en dos casos penales por evasión fiscal y posesión ilegal de un arma de fuego. Biden había dicho en repetidas ocasiones que no intervendría en los problemas legales de su hijo, de 54 años y que lucha contra una adicción a las drogas.
“Dije que no interferiría en la toma de decisiones del Departamento de Justicia y mantuve mi palabra incluso cuando vi cómo mi hijo era procesado de manera selectiva e injusta”, dijo el líder demócrata en una declaración este domingo.
Hunter Biden se declaró culpable en un juicio celebrado en septiembre por evasión fiscal, y se enfrenta a hasta 17 años de cárcel. Por la acusación separada de posesión de armas, afrontaba 25 años de prisión. La revelación de las dos sentencias estaba prevista para mediados de diciembre.
Antes de dejar la Casa Blanca, Joe Biden ha decidido indultar a su hijo para evitar que vaya a prisión. “Creo en el sistema de justicia, pero también creo que la política infectó este proceso e indujo a un error judicial”, añadió el presidente en su declaración.
La decisión es polémica en un país donde se cuestiona mucho la independencia de la Justicia. El presidente electo, Donald Trump, ha colocado a colaboradores leales al frente del FBI y también del propio Departamento de Justicia. “¿Incluye el indulto concedido por Joe a Hunter a los rehenes del 6 de enero, que ya llevan años encarcelados? Menudo abuso y error judicial”, ha escrito en la red social X Truth Social, en referencia a los encarcelados por el asalto al capitolio de enero de 2021.
No es la primera vez que un presidente de EEUU utiliza el poder presidencial para indultar a un miembro de su familia. Ya lo hizo Bill Clinton, que perdonó a su medio hermano por cargos de posesión de cocaína. Durante su primer mandato, Trump perdonó al padre de su yerno por evasión fiscal, aunque en ambos casos ambos ya habían cumplido sus penas de prisión.
