La reunión secreta de los cardenales en la Capilla Sixtina inició este miércoles y en la primera votación, como suele ser común, no se llegó a un acuerdo.
Este miércoles 7 de mayo inició el Cónclave que reunió a los cardenales católicos en la Capilla Sixtina y, en la única instancia de votación de la jornada, los purpurados no llegaron al mínimo de votos requeridos para elegir al sucesor del papa Francisco y dieron a conocer la decisión mediante la clásica fumata negra. De esta manera, la reunión bajo llave continuará el jueves.
A partir de mañana, se llevarán a cabo cuatro rondas de votación diarias, dos a la mañana y dos a la tarde, hasta que se defina quién será el próximo Papa. Después de cada votación, el humo que saldrá de la chimenea determinará a qué resultado llegaron: será blanco en caso de que haya una decisión final y negro si aún no hubo consenso por el nuevo pontífice.
Leer más Comienza el cónclave para elegir al nuevo Papa
Cuando finalmente se elija al próximo Papa, aparecerá el humo blanco en las afueras de la Capilla Sixtina para confirmar la elección exitosa. Además, las campanas de la Basílica de San Pedro comenzarán a repicar, anunciando al mundo la noticia.
Luego, el flamante Sumo Pontífice saldrá a la “sala de las lágrimas” para vestirse con los hábitos papales y, finalmente, desde el balcón central de la basílica, se proclamará el tradicional “Habemus papam”. Este será el momento en que el nuevo pontífice se presentará por primera vez a los fieles y les otorgará su bendición Urbi et Orbi, una de las primeras acciones que realiza tras su elección.