El Tribunal Supremo de Brasil empezó a examinar este 25 de marzo si abre un juicio contra Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado, en un caso que podría llevar al expresidente ultraderechista a una larga pena de prisión.
Comenzó a deliberarse este martes sobre la denuncia que presentó la Fiscalía acusándole de haber liderado un intento de golpe de Estado.
Cinco jueces de la máxima corte judicial del país decidirán en los próximos días si aceptan la denuncia y Bolsonaro pasa a ser imputado, el primer paso para un juicio.
Más de 40 años de cárcel
En la apertura de la sesión, el fiscal general volvió a defender que Bolsonaro lideró la trama que intentó evitar que Lula da Silva asumiera el poder. Los delitos que se le atribuyen suman más de 40 años de cárcel.
Además del expresidente, los jueces también deciden si imputan a otros siete integrantes del llamado grupo crucial de la trama golpista: están el entonces vicepresidente, varios exministros y altos representantes de las Fuerzas Armadas.
Víctima de una persecución
El propio Bolsonaro, que se dice víctima de una persecución, asistió a la apertura de la sesión del Supremo junto a su abogado y aseguró que el tribunal no es el foro competente para juzgarle y que apenas tuvo tiempo para presentar su defensa.
La mayoría de analistas dan por segura su imputación y calculan que el juicio se celebrará en el segundo semestre de este año.