El actor logró un pico de popularidad con la comedia que protagonizó con Pablo Rago. El programa rondaba los 50 puntos. Luego de dos ACV, no logró recuperarse. Tenía 67 años.
El actor Carlos Andrés Calvo, protagonista de muchos éxitos de televisión, entre ellos Amigos son los amigos, murió este viernes a los 67 años. Estaba internado en un centro de alta complejidad donde fue trasladado el jueves, cuando su cuadro de salud se agravó.
Calvo pasó los últimos 20 años de su vida con complicaciones que lo alejaron de su trabajo, luego de sufrir dos ACV, en 1999 y en 2010. Además, en los últimos años, debido a su situación, no salía de su casa donde era asistido por un equipo de profesionales las 24 horas.
Había perdido la movilidad y el habla, debido a una cantidad de problemas que fueron deteriorando su salud, con algunas breves etapas en las que pudo regresar a trabajar, con ciertas dificultades, pero con el apoyo de sus amigos y el público.
Estaba separado de la actriz y psicóloga Carina Gallucci, la madre de sus dos hijos, Facundo, de 21 años, y Abril, de 14 años. Sin embargo, ella fue un gran sostén y estuvo siempre pendiente de la salud del actor. Al igual que sus hijos.
Su carrera comenzó en 1974 cuando tuvo un papel en la obra de teatro La lección de anatomía, la cual incluía un desnudo. La obra y la actuación generaron polémica, pero Carlín (su apodo adquirido en sus épocas de galancito), llamaron la atención sobre él.
Luego siguieron otras obras en esa misma línea como Una libra de carne y Equus, entre otras.
Pero su gran popularidad la obtuvo cuando llegó a la televisión y fue el protagonistas de numerosas comedias que arrasaron en el rating.
La que lo ubicó en el tope de los preferidos por el público fue Amigos son los amigos, entre 1990 y 1993, donde compartió elenco con Pablo Rago. Entonces el programa rondaba los 50 puntos de rating.
De ahí quedaron frases inolvidables que pasaron a ser usadas por todo el mundo, como “¿Qué hacés, péndex?”, “Vos, fumá” y “¡Es una lucha!”, que aún hoy están identificadas con la voz del actor. En esos años, Calvo era uno de los personajes más queridos por el público.
La tira se estrenó en 1990 por Telefe, donde estuvo hasta 1992 y luego hubo un año más por Canal 9. Con números impensados para hoy, Amigos son los amigos calentaba el horario central con picos que treparon a los 53 puntos, gracias a un público de todas las edades.
Calvo compartió nombre con su personaje, Carlos “Carlín” Cantoni y le prestó mucho de su personalidad. El actor interpretaba a un joven fletero, soltero, que se vio obligado a compartir su departamento con Pablo Pintos, por entonces un adolescente Pablo Rago, que le complicaba la vida. Principalmente en lo que tenía que ver con su agitada vida sentimental. Sin embargo, entre ambos surgió una amistad más allá de las diferencias.
El trabajo, las relaciones con las mujeres y otros temas fueron como una pincelada de época de un sector social. Y Carlín se convirtió en el galán canchero y de barrio que conquistaba a las mujeres en la telenovela y en la vida real y caía simpático a los varones que lo querían como amigo para ellos.
Cris Morena, Katja Alemán, Julieta Ortega, María Carámbula, Edda Bustamante, Viviana Saccone y Marixa Balli, entre otras actrices, compartieron elenco con Calvo.
Antes de ese gran éxito, Calvo ya había logrado instalarse con su primer protagónico a lado de Alberto de Mendoza y Alicia Bruzzo en la telenovela El Rafa.
Más tarde, en otra telenovela, Juan sin nombre, compartió trabajo con Luisina Brando. Allí nació un romance que acaparó toda la atención mientras duró la apasionada relación.
En 1984 formó dupla con Ricardo Darín en la obra de teatro Extraña pareja, que permaneció dos temporadas en escena.
Y en cine, es recordado su personaje en Adiós, Roberto, junto a Víctor Laplace, uno de los primeros filmes en el que se abordaba la temática de una relación homosexual entre dos hombres.
A fines de los ’90, la salud empezó a jugarle malas pasadas y la vida de Calvo ya no volvió a ser la misma. En 1999 sufrió un accidente cerebrovascular (ACV), por el que estuvo internado varios días y por el cual se fue a rehabilitar un tiempo a Cuba.
Luego de una lenta mejoría, con el tiempo, Calvo pudo volver a trabajar, en pequeños papeles a pesar de algunas dificultades en la movilidad, como secuela del ACV.
Pero en 2010, poco antes de salir al escenario, en la obra Taxi 2, que estaba protagonizando en Mar del Plata, el actor se olvidó el texto, debido a un nuevo ACV. Luego de unos días de internación en los que estuvo grave, se recuperó levemente.
Desde 2013 se encontraba en su hogar, continuando con la rehabilitación, siempre asistido de enfermeras y de sus afectos.
Si bien su estado se mantuvo relativamente estable, ya no volvió a recuperar el habla ni la movilidad total. En los último días, debido a que se agravó su cuadro, el actor ya no reconocía a quienes estaban a su alrededor.