Traccionada por la ola de “famosos” que le agregaron años a sus caras, FaceApp se convirtió en los últimos días en la aplicación más descargada del país, pese a que se desconoce su origen y el destino de las imágenes que se le entregan.
FaceApp, la aplicación móvil que le agrega o le quita años y detalles a los rostros y que en los últimos días se viralizó en la Argentina, está en “una zona gris”, se desconoce quién está realmente detrás y encierra riesgos sobre la privacidad de los datos de los usuarios, advirtieron hoy especialistas en seguridad informática.
Esta app demuestra lo acelerados que vivimos! Lo a futuro que pensamos y lo que nos ASUSTA crecer! Lejos de ponerme melanco con un juego ? les vengo a decir SONRIAMOS Y VIVAMOS LIIIBRES! (Me lo auto-digo también) Ojalá siempre sonría así! ❤️ pic.twitter.com/Vb3Myb3yqa
— Lali (@lalioficial) July 15, 2019
El creador del software es un desarrollador ruso, Yaroslav Goncharov, y la aplicación utiliza redes neuronales (una técnica de inteligencia artificial) para escanear los rostros de los usuarios, cruzarlos en bases de datos y modificarlos con distintos agregados como más o menos edad, barba o cambio de género, entre otros filtros.
“Se supone que hay una persona detrás de FaceApp, pero es totalmente desconocida. Este es un planteo amargo, pero es lo que deberíamos hacer cada vez que subimos datos personales”, advirtió a Télam Cristian Borghello, director de Segu-Info, y sugirió que “podrían usar la información que estamos subiendo para, por ejemplo, identificación biométrica. Detrás puede haber cualquiera, una empresa, un gobierno…”.
En tanto el consultor en seguridad informática Alexis Sarghel consideró que mediante esta aplicación, por ejemplo, “cualquier agencia de inteligencia podría estar actualizando sus bases de datos con datos actuales míos. Y hoy un software puede sacar mucho de una imagen, no solamente mi cara. Estoy brindando mucha información: ¿a cambio de qué? De entretenimiento, de ocio”.
“Estamos entrenando gratis inteligencia artificial, estamos alimentando gratis una base de datos de origen desconocido”, cuestionó.