Los organizadores del Grand Slam francés anunciaron la medida y destacaron que el objetivo es “marcar un ejemplo” para el futuro de las competencias del ATP y WTA.
Tras un primer anticipo por fines de mayo y un control de la pandemia en Francia que llevó a abrir las tribunas en el fútbol, por ejemplo, Roland Garros se suma a esa decisión con el visto bueno del Estado y confirmó la presencia de público en una capacidad reducida para sus tres principales canchas.
Según informaron desde la organización del evento parisino y de la Federación Francesa de Tenis (FFC) se permitirán 11.500 espectadores por día repartidos en tres zonas: cinco mil en el estadio principal Philippe Chatrier, cinco mil en Suzanne Lenglen y 1500 en la cancha Simonne Mathieu.
Como parte del protocolo, los asistentes, obligados a utilizar barbijo, tendrá acceso a la zona del estadio con una entrada numerada y su ubicación estará sujeta al protocolo con el espacio de un asiento en cada fila.
Por otro lado, se anunció que los tenistas se concentrarán en dos hoteles de París durante su participación y que habrá estrictos controles para garantizar su salud. Sin embargo, u duro golpe tiene que ver con los premios económicos, que se redujeron de 42.66 a 38 millones de euros, aunque destacaron que el triunfo va por otro lado.
“Desde nuestro punto de vista, el torneo de 2020 no es solamente un evento deportivo, es también la prueba de que, a pesar del clima actual, tenemos los recursos humanos y pericia en el campo de los eventos deportivos para organizar un evento de esa escala”, sentenció Jean-François Vilotte, Director General de la FFT, en la página de Roland Garros.