El equipo de Santiago del Estero mereció el resultado con un gran partido y derrotó por primera vez en su existencia al equipo de Boedo, que profundiza su crisis futbolística.
San Lorenzo llegó al Nuevo Gasómetro con el objetivo de mantener la senda ganadora luego de la victoria ante Banfield, pero se llevó una gran sorpresa con Central Córdoba, que acumulaba 1 solo punto de los 12 que disputó como visitantes.
Desde el comienzo, el equipo santiagueño salió a la caza de los tres puntos y generó complicaciones en la defensa del local, que jugó uno de sus peores partidos en lo que va de la era Pizzi, y que se profundizó con la expulsión de Ferrari en apenas 21 minutos de juego. Esa ventaja supo ser aprovechada y en 31 minutos, Herrera puso el 1 a 0.
La segunda etapa mostró una imagen diferente de San Lorenzo que, pese al hombre de menos, salió en búsqueda del empate dejando espacios atrás y lo pudo lograr con Bruno Pitton, el inesperado goleador del torneo, que tomó un rebote en el área y fusiló al Ruso Rodríguez.
La tranquilidad y aliento en el Nuevo Gasómetro no iba a durar mucho, ya que tres minutos después, Alsugaray definía con clase para el 2 a 1.
Los murmullos comenzaron a bajar de la tribuna y la falta de respuestas en el campo de juego generaron un ambiente de preocupación y bronca entre los hinchas que se manifestaron.
Los gritos y críticas se agrandaron cuando a los 41 Marcelo Meli metía el 3 a 1 y en el descuento, Alzugaray sellaba su doblete y la goleada.
Victoria histórica
Esta victoria histórica fue la primera de Central Córdoba ante San Lorenzo en tres partidos jugados por la Primera División. Las veces anteriores, había perdido 7 a 1 y 4 a 1, siendo esta la última presentación en el Viejo Gasómetro, en el año 1967.
Ahora, el “Ferroviario” se permite soñar con la salvación y el “Ciclón” volvió a dejar pasar la chance de ser puntero de la Superliga.