Los Bávaros se impusieron con jerarquía al cuadro catalán en el Estádio da Luz de Lisboa y esperan en las semifinales por el ganador del duelo entre Manchester City y Olympique Lyon
El fútbol nunca se olvidará del 14 de agosto de 2020, el día en el que el Barcelona de Lionel Messi fue aplastado por Bayern Munich 8 a 2, en Lisboa, en los cuartos de final de la Champions League.
En un duelo entre favoritos, únicos dos campeones de la competición supervivientes en cuartos, al gigante alemán necesitó apenas media hora para descubrir todas las carencias defensivas del Barcelona, que sufrió su peor derrota histórica en la Copa de Europa.
Brilló Thomas Muller con un doblete (4 y 31) y en medio marcaron el croata Ivan Perisic (21) y Serge Gnabry (27). Ya en la segunda parte (63) Joshua Kimmich logró el quinto. El polaco Robert Lewandowski (82) y el brasileño Coutinho, cedido al club alemán por el Barcelona, cerraron la cuenta (85 y 89).
En unos diez primeros minutos electrizantes, había igualado para los azulgranas David Alaba, con un tanto en propia puerta tras despejar mal un centro de Jordi Alba (7). En la segunda parte llegó el gol de Luis Suárez (57).
Con una caída estrepitosa finalizó el periplo europeo de un Barcelona que cierra la temporada sin títulos. Su última ‘Orejona’ data de 2015 cuando Messi y Suárez estaban en su esplendor, en un trío de ensueño que completaba Neymar.
Por su parte, los Bávaros no han perdido ningún partido en el 2020, llevan una racha de 27 triunfos –19 de manera consecutiva- y un empate, y el miércoles 19 se enfrentarán en las semifinales al vencedor de la llave entre Manchester City y Lyon (jugarán este sábado). En Múnich sueñan cada vez con más fuerza con repita el ‘Triplete’ logrado en la temporada 2012/13, sobre todo porque hay sobrevivientes como Thomas Müller, Manuel Neuer, Jérôme Boateng, David Alaba y Javi Martínez.