El capitán del conjunto catalán tuvo una jornada de entrenamientos intensa en donde demostró que está con todas las pilas para volver a la competencia.
El Barcelona realizó su segundo entrenamiento en la Ciudad Deportiva “Joan Gamper”, y como sucede desde que se reinició la actividad, los jugadores fueron divididos en dos grupos. Hasta aquí, entonces, nada nuevo. Lo nuevo, lo bueno, fue ver en acción a Lionel Messi, quien a lo largo de la práctica trabajó como si la actividad nunca se hubiese detenido a causa del coronavirus, y el próximo fin de semana hubiese partido por La Liga.
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El rosarino corrió, marcó, se tiró al piso para robar la pelota, y coronó el entrenamiento con un golazo, en el cual armó una pared con Sergio Busquet, y recibió un pase de Jordi Alba para anotar con su pierna derecha tirándose al piso.
