El serbio se impuso por 7-6 (7-5), 1-6, 7-6 (7-4), 4-6 y 13-12 (7-3) y ganó su 16° título de Grand Slam.
Aplauden de pie los privilegiados que destinaron más de cuatro horas de su vida este domingo 14 de julio sentados en la cancha central del All England. Y también aplauden -o deberían hacerlo- los afortunados que frente a la pantalla de la tele, de una computadora o del celular, también pudieron disfrutar de -probablemente- una de las mejores finales de Wimbledon todos los tiempos.
Roger Federer y Novak Djokovic regalaron una final del Abierto de Londres como sólo dos genios del tenis lo podían hacer. El serbio se impuso tras un maratónico 7-6 (7-5), 1-6, 7-6 (7-4), 4-6 y 13-12 (7-3) y defendió el título del tercer Grand Slam de la temporada.
A match for the ages…
— Wimbledon (@Wimbledon) July 14, 2019
The moment @DjokerNole retained his crown to become #Wimbledon champion for a fifth time after a historic men’s singles final#JoinTheStory pic.twitter.com/zDQlEBviMD
La de 2008, con Nadal venciendo a Federer por 6-4, 6-4, 6-7(5), 6-7(8) y 9-7 en cuatro horas y 48 minutos era hasta este domingo la más larga final Wimbledon. En la edición 133, Djokovic se impuso en cuatro horas y 57 minutos.
Djokovic lleva ya 16 títulos del Grand Slam (cinco en Wimbledon), acercándose a los 18 del español Rafael Nadal, que no obstante, y gracias al triunfo del serbio mantendrá el puesto de número dos del mundo este lunes, con 485 puntos de ventaja sobre Federer.
Con la victoria de este domingo, Djokovic lleva ya tres finales ganadas a Federer en este torneo (2014 y 2015). El serbio perdió el primer duelo entre ellos en el All England, en las semifinales de 2012. En total aventaja con 26-22 en el balance, ganando los cinco últimos disputados. Federer no lo vence desde el 2015, en la primera fase de las Finales ATP.
El ganador recibió un cheque de 2.350.000 libras (2.622.157 euros o 2.955.423 dólares) y 2.000 puntos ATP. La final de este año ha sido la primera, a un total de cinco sets, desde la del 2014, cuando Djokovic se impuso a Federer, por 6-7 (7), 6-4, 7-6 (4), 5-7 y 6-4 en tres horas y 56 minutos.
El argentino Damian Steiner, de 44 años, nacido en Buenos Aires y que iba para periodista deportivo en su juventud, dirigió la final este año, la primera de su carrera del Grand Slam.