El futbolista paraguayo le dijo no a la propuesta de la dirigencia, que había ofrecido saldar la deuda de casi 400.000 dólares en 10 cuotas. Tras el fallo del TAS, Colón deberá resolver la situación en diez días o será inhibido para incorporar por tres mercados de pases.
Uno de los temas más delicados que enfrenta Colón en este cierre de año es el conflicto con el futbolista paraguayo Alberto Espínola, quien reclama una deuda tras su breve paso por el club.
Un fallo del Tribunal Arbitral del Deporte obliga a la institución rojinegra a abonarle al jugador una cifra cercana a los 400.000 dólares antes del 17 de octubre para evitar la inhibición por tres mercados de pases.
Según se conoció, Colón ofreció un plan de pago en cuotas para cumplir con la sentencia, pero la propuesta fue rechazada por el propio Espínola, quien exige el pago total e inmediato del monto adeudado.
Este reclamo se suma a la compleja situación económica que atraviesa el club y representa un nuevo desafío para la dirigencia saliente, que deberá resolverlo antes de la asunción de las nuevas autoridades.
El conflicto con Espínola, generado durante la presidencia de José Vignatti, sumado a otros compromisos pendientes, deja en evidencia la necesidad de una gestión ordenada y un plan financiero claro para que Colón pueda estabilizarse y enfocarse en su reconstrucción deportiva durante el extenso receso que recién comienza.
