Murió Robert Redford, leyenda de Hollywood

Murió Robert Redford, leyenda de Hollywood

El actor y director Robert Redford, ícono del cine estadounidense de las últimas seis décadas, murió el 16 de septiembre por la mañana a la edad de 89 años, informó la prensa estadounidense.

La leyenda del cine Robert Redford, famoso nombre de la gran pantalla, cuya carrera se expandió a lo largo de seis décadas, falleció este martes por la mañana con 89 años, en su domicilio de Utah. Nació como Charles Robert Redford Jr. el 18 de agosto de 1936 en Santa Mónica, California.

El cineasta murió mientras dormía y no se informó de una causa específica de su deceso, según un comunicado de Cindi Berger, jefa ejecutiva de la firma de publicidad Rogers & Cowan PMK, citado por el diario New York Times .

El presidente Donald Trump y la actriz Maryl Streep estuvieron entre los primeros en rendirle tributo. “Robert Redford tuvo una sucesión de años en los que no había nadie mejor”, dijo Trump a la prensa. “Uno de los leones ha fallecido (…) Descansa en paz mi querido amigo”, expresó Meryl Streep.

Una larga carrera

Robert Redford trabajó para los grandes estudios, que le ofrecieron unos 70 papeles, siete de ellos bajo la dirección de Sydney Pollack. En su mayoría fueron personajes positivos, comprometidos ( Los tres días del cóndor ), románticos ( El gran Gatsby ), simpáticos incluso cuando encarnaba a ladrones, como en Butch Cassidy and the Sundance Kid (1969) o El golpe (1973).

Participó en películas icónicas como Jeremiah Johnson (Palma de Oro en 1972), Todos los hombres del presidente (cuatro Óscar en 1977) o Out of Africa (siete Óscar en 1986), que lo entronizó como el arquetipo de amante ideal.

Después de 20 años como actor, pasó detrás de la cámara, convirtiéndose en director ganador del Óscar y en cofundador del emblemático festival Sundance, que se ha convertido en la referencia internacional del cine independiente.

La Academia nunca le premió un papel concreto, pero le otorgó el Óscar a mejor película y mejor dirección en 1981 en su debut como realizador con “Ordinary People” (Gente corriente, Gente como uno) y le concedió en 2002 una estatuilla para toda su carrera.

Un camino alejado de Hollywood

Siga toda la actualidad internacional descargando la aplicación RFI

Demócrata convencido, activista ambiental, defensor de las tribus amerindias y de los paisajes estadounidenses, el vaquero de mechas doradas buscó toda su vida trazar su propio camino, manteniendo, siempre que pudo permitirírselo, las distancias con Hollywood. La imagen glamorosa siempre le molestó. “Soy un chico común y corriente con cabello rubio”, pregonaba, recordando que nadie lo consideraba guapo cuando era un desconocido y estaba desempleado.

Desde mediados de la década de 1970, cuando se convirtió en el rey de la taquilla, optó por “refugiarse cada vez más en la naturaleza”. Por entonces, se construye una casa y una vida en las montañas de Utah, en un lugar que bautiza “Sundance”, en homenaje a “Sundance Kid”, su primer gran personaje, que le debe a su amigo Paul Newman.

“No quería la fama. Me cayó encima y me vi obligado a aceptarla”, confió en 2013 a la revista francesa Télérama. “Algunos hacen terapia. Yo tengo a Utah”, agregó.

Junto a su esposa, una mujer mormona -cuya vida compartida durante 27 años-, y sus hijos (el mayor murió en 2020), este californiano construyó una especie de utopía ecológica: su propiedad cuenta hoy con millas de hectáreas, incluyendo una estación de esquí, una granja y un criadero de caballos.