El director del efector, Bruno Moroni, destacó que el edificio, de 115 años, recibe el mantenimiento necesario. “El derrumbe ocurrió en el contexto de una reforma que se estaba realizando en el hospital”, enfatizó.
Bruno Moroni, director del Hospital Cullen,aseguró que el derrumbe registrado el lunes por la mañana no representa un riesgo para el edificio, ni está vinculado a la estructura del mismo, que cuenta con 115 años de antigüedad.
Se trata del incidente que se registró en el efector, en el marco de una obra de remodelación destinada al área de neurotoxicología, un espacio considerado “muy necesario” para el nosocomio.
“Fue en el contexto de esta reforma que se estaba haciendo en el hospital, una obra delegada en el área de neurotoxicología, donde ocurre esta situación”, explicó Moroni.
Cabe recordar que por el hecho un trabajador de la construcción permanece internado en terapia intensiva, con asistencia respiratoria mecánica.
Además, destacó que se conformó un equipo técnico integrado por un ingeniero civil y un arquitecto, quienes están trabajando en la estabilización de la estructura afectadacomo prioridad.
Moroni enfatizó que, tras el derrumbe, la prioridad inmediata fue garantizar la seguridad y la atención de los pacientes y el personal del hospital. “Se trabajó con Gestión de Riesgo de la Municipalidad y el Ministerio para actuar rápidamente y evitar situaciones que pudieron ser mucho más complejas”, señaló.
Aclaró que el derrumbe no está relacionado con la antigüedad del edificio ni con falta de mantenimiento. “El mantenimiento del edificio se hace. Ayer (por el lunes) con el ingeniero que vino al hospital, se terminó de confirmar que no es un problema de mantenimiento, sino un accidente en un área donde se llevaba a cabo una reforma”, afirmó.
El director insistió en que la situación se circunscribe al ámbito de la obra en curso y descartó cualquier riesgo edilicio. “No es que el edificio está en riesgo. Quiero hacer hincapié en que esta situación se dio en un contexto de una reforma”, concluyó.
Estado de salud de los obreros afectados
Según un parte oficial del Hospital Cullen, dos de los obreros afectados fueron dados de alta tras recibir atención en la guardia central. Uno presentaba una lesión en el cuero cabelludo y el otro una lesión leve en el tobillo. Sin embargo, el tercer trabajador permanece en estado crítico en la unidad de terapia intensiva.
“El paciente necesita una evaluación permanente a nivel de la respuesta neurológica. Eso hace que, permanentemente, en terapia intensiva se le realicen estudios. Ayer se le realizó un ecocardiograma, un electroencefalograma y se va monitorizando todo este aspecto”, explicó Moroni.
El director detalló que, aunque el obrero presenta fracturas cervicales y de clavícula, el foco principal está en su evolución neurológica. “Las lesiones neurológicas que puede haber son variables y hay que ir viendo; son importantes en estas horas, cómo va respondiendo a estos estímulos”, aclaró.
