El especialista encargado de los trabajos se mostró optimista para albergar el trabajo.
El Estadio Mario Alberto Kempes se alista para recibir uno de los enfrentamientos más esperados del fútbol argentino: el Superclásico entre Boca Juniors y River Plate, en los cuartos de final de la Copa de la Liga. Con un historial de nueve encuentros de esta magnitud, las expectativas están por las nubes, pero una preocupación inicial sobre el estado del campo de juego generó especulaciones.
A medida que se anunciaba la sede del partido, las miradas se posaban en el césped del estadio cordobés, que mostraba signos de necesitar atención. Sin embargo, los trabajos de mantenimiento están en marcha para asegurar que el terreno esté en óptimas condiciones para el enfrentamiento.
Aunque las imágenes más recientes muestran que el césped no alcanzará la perfección esperada, el ingeniero agrónomo a cargo del cuidado del campo ofreció tranquilidad a los aficionados. En declaraciones a TyC Sports, el experto explicó el proceso de resiembra invernal, que es común en esta época del año.
“Vamos a llegar muy bien”, aseguró el agrónomo. “Es un proceso que toma unos días, pero pronto veremos una mejora significativa en el césped. La resiembra es parte del mantenimiento habitual, y estamos dentro de los tiempos normales”.
Con el transcurso de los días, los cambios prometidos por el especialista comenzaron a hacerse evidentes. Aunque el césped no alcanzará una calificación perfecta, se espera que esté en condiciones óptimas para el partido.
“Estamos confiados en que el campo estará en un buen estado, como nos tiene acostumbrados el Kempes”, concluyó el ingeniero agrónomo. “El clima está de nuestro lado para esta etapa, y estamos haciendo todo lo posible para que el terreno esté en su mejor forma para el Superclásico”.
Con el respaldo de los expertos y el compromiso del equipo de mantenimiento, el Estadio Mario Alberto Kempes se prepara para recibir a miles de fanáticos en un ambiente de fútbol de alta intensidad, donde el estado del campo no eclipsará la emoción del encuentro.