La muerte del senador nacional de Tierra del Fuego conmocionó al ambiente político. La Policía encontró una carta firmada por él, en la que se refirió a su esposa y a su amigo y padrino de su hijo.
Matías Rodríguez (41), el senador nacional por Tierra del Fuego y militante de La Cámpora que encontraron muerto este miércoles en su casa, dejó una nota en la que hizo una revelación sobre su vida privada. Según habría escrito, se trata de un engaño por parte de su mujer, concejal de Ushuaia, y el intendente de la ciudad, que era su amigo.
En el texto, escribió: “Esta madrugada del 18 de octubre encontré a Walter Vuoto y Laura Avila en la habitación matrimonial de la casa de Walter. Me confesaron ser amantes hace tiempo. Mi amigo, padrino de bodas y padrino de uno de mis hijos. Ella, mi esposa y el amor de mi vida”. La carta lleva el nombre del senador, si firma y su DNI.
Vuoto, además de intendente de Ushuaia, también es dirigente de La Cámpora y muy cercano al ministro del Interior, Wado de Pedro, y a Máximo Kirchner.
En el Día de la Lealtad peronista que fue este martes, Vuoto había publicado en Instagram varias fotos del acto que se hizo en Ushuaia. En una de ellas se lo ve abrazado y sonriente con Avila, la mujer de Rodríguez, que es la jefa del bloque de concejales del kirchnerismo local.
Ese mismo día, la propia Avila publicó en su cuenta de X una foto de Vuoto dando su discurso. En la imagen, ella lo mira desde el estrado. Además, Rodríguez había publicado el domingo un mensaje de felicitación a Ávila por el Día de la Madre.
La policía local montó un operativo en la casa del legislador, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado alrededor de las 19 de este miércoles. La nota que dejó fue subida a un chat donde está el intendente Vuoto, a las 17.47.
Poco después del hallazgo, el mismo Vuoto subió un mensaje de condolencias a X. “Profundo dolor por la partida de mi compañero y amigo Matías Rodríguez. Mis condolencias y acompañamiento a familiares, amigos y compañeros ante esta pérdida irreparable”, escribió a las 21.12.
