El entrenador del Millo, que anoche celebró la clasificación a octavos de la Libertadores, está cerca de cerrar un semestre muy positivo.
El entrenador de River Plate, Martín Demichelis, está a un paso de cumplir los tres objetivos de su primer semestre al frente del equipo, luego de haber conseguido anoche el pase a octavos de final de la Copa Libertadores de América.
La otra meta en cada inicio de temporada de River, que es ganar el superclásico contra Boca, ya la saldó y ahora resta concretar el título de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), en donde suma 50 unidades y tiene una ventaja de 10 puntos a falta de media docena de fechas por jugarse.
Esta medalla se la podrá colgar con ganar tres partidos de los seis que restan en el campeonato, sin depender de otros resultados y podría adelantar los festejos ante Colón la semana que viene en el Más Monumental, con derrotas de Talleres (40) y San Lorenzo (38), hoy sus inmediatos perseguidores.
El primer logró que selló el DT fue haber ganado los dos mano a mano definitorios que tuvo en el semestre, ante Banfield por 3-2 en el desempate para jugar la final del Trofeo de Campeones ante Boca; y el cruce de Copa Argentina 3-0 ante Racing de Córdoba.
Luego tuvo el superclásico de local y lo ganó 1-0 con gol de Miguel Borja, con un penal polémico sobre la hora que al árbitro Darío Herrera le costó estar dos fechas parado por la AFA, en un trámite en el cual superó en el juego a su rival, para seguir avanzando con resultados favorables en los grandes objetivos de la temporada.
Por delante le quedaba el pase a octavos de la Copa Libertadores, en donde con algo de sufrimiento pero con triunfos en partidos claves y con autoridad, como el de Fluminense de local por 2-0 y el de anoche ante The Strongest, por el mismo resultado.
Si bien la nota de este último examen no fue alta porque al fin de cuentas clasificó como segundo y pagó caro los malos partidos que tuvo de visitante -en donde no pudo ganar en la fase de grupos y fue goleado en Brasil (5-1)-, que haya clasificado a pesar de esas derrotas le dan mérito al logro.
Por otro lado, a favor del entrenador se puede computar que mientras le dedicaba esfuerzo a la Copa Libertadores no perdió terreno en el torneo local, en donde mantuvo el nivel de victorias y se recuperó muy rápido de los pocos traspié que tuvo, para estirar la diferencia de puntos.
En ese sentido, de los 21 partidos que jugó, lleva ganados 16, con sólo dos empates y apenas tres derrotas, lo que le da una efectividad altísima cercana al 80%: es el equipo que más ganó, que menos perdió y que más goles anotó.
Asimismo, en las fechas que restan, sólo enfrentará a dos equipos que están dentro del lote de los cinco primeros, Estudiantes y San Lorenzo, y la mitad de los partidos los jugará de local, en donde tiene una superioridad notoria de 12 victorias (11 de ellas seguidas) y solo una derrota, contra Arsenal de Sarandí.
De no surgir ningún imprevisto, Demichelis no tendrá inconvenientes en cumplir los tres objetivos, con título de la LPF incluido en su estreno como DT, mucho antes de que termine la competencia a fines de julio.
Desde ahora y hasta el fin del semestre, el entrenador tiene como prioridad cerrar lo antes posible el torneo local y avanzar en la Copa Argentina, en donde debe jugar contra Talleres de Córdoba sin fecha confirmada.
Con este panorama, el equipo cerró el capítulo de la Libertadores hasta el 5 de julio, cuando en el sorteo de la Conmebol sepa cuál equipo de los primeros le tocará en agosto.
En dos partidos en donde enfrentará a rivales que están por debajo de la mitad en la tabla de posiciones (Barracas Central y Colón) River podría sellar el título de la LPF y para eso se entrenará esta tarde en el predio de Ezeiza, ya que ambos juegos se programaron para el sábado en el barrio porteño de Barracas, y el miércoles próximo en Núñez.
En cuanto al partido ante el “Guapo”, el DT evaluará las recuperaciones de Enzo Pérez y Robert Rojas, quienes anoche dejaron el campo de juego con sendos traumatismos. El viernes, cuando el plantel quede concentrado, el cuerpo técnico determinará si ambos jugadores se mantienen en el equipo titular.
En tanto, seguirá trabajando diferenciado el defensor Leandro González Pírez, afectado por una lesión muscular, y su regreso podría darse ante Colón, o contra San Lorenzo, en la fecha 24ta. en el Nuevo Gasómetro.
Por otro lado, es posible que siga sin concentrar al menos tres semanas más el delantero Matías Suárez, quien padece una sinovitis crónica en la rodilla y los médicos evaluarán si vuelven a realizarle una artroscopia en la zona afectada.