El desprendimiento de una canaleta del estadio 15 de Abril obligó al árbitro Espinoza a suspender el partido y un grupo de hinchas protestó frente a la sede.
El partido que debían jugar este domingo a las 19.30 los equipos de Unión y Lanús por la decimocuarta fecha del campeonato de la Liga Profesional fue suspendido por falta de garantías de seguridad para los ocupantes de una zona de plateas del estadio 15 de Abril del club santafesino a raíz del desprendimiento de una canaleta de desagüe que a raíz de los fuertes vientos que azotaron por la tarde a la ciudad quedó pendiendo sobre ese sector.
Los organizadores del torneo confirmaron que el partido de Unión y Lanús se suspendió por decisión de la policía, la Municipalidad de Santa Fe y los bomberos. A través de un comunicado, anunciaron que el cotejo se reprogramará en los próximos días.
Los locales enfatizaron que la cancelación del encuentro fue una medida para “resguardar la seguridad de los espectadores, planteles y trabajadores” en el 15 de Abril. Sin embargo, varios hinchas tatengues se juntaron afuera para protestar contra la comisión directiva.
Luego de una tarde cargada de frustración por la suspensión, la policía intentó dispersar al público y empezaron los disturbios cerca de la cancha de Unión. De un lado arrojaron piedras y los uniformados dispararon balas de goma en medio de las corridas.