¿Se respetó el debido proceso en la condena a CFK?, el editorial de Martín Sperati

¿Se respetó el debido proceso en la condena a CFK?, el editorial de Martín Sperati

El periodista realizó su comentario en el programa Un día Perfecto.

Cristina Fernández de Kirchner fue condenada a 6 años de prisión.

Por Martín Sperati

A Cristina la condenaron por defraudar al Estado. Por direccionar la obra pública a Lázaro Baez, un bancario que se convirtió en millonario de la noche a la mañana. La justicia no encontró elementos contundentes, si no que elucubró que el ex bancario le entregaba a Cristina un jugoso retorno, por eso el enriquecimiento ilegal de la ex presidenta.

La figura de asociación ilícita se cayó por su propio peso. Porque fue imposible probar que la doctora haya armado una organización para defraudar al Estado.

Estoy defendiendo a Cristina. No. Estoy opinando sobre el argumento de los fiscales que intentaron probar que robó.

Como asociación ilícita era demasiado, fueron por administración fraudulenta. Algo que también podría caerse por su propio peso, porque no hay un solo elemento que acredite semejante teoría.

Luciani desdobló inequívocamente los juicios de los Sauces y Hotesur con el de Vialidad. No se puede juzgar dos veces el mismo hecho. En todo caso, podría haberle cabido la figura de tráfico de influencias, suponiendo que tuviera poder de influencia por representación política.

Aun así, no hubiesen encontrado hecho de la presidenta haciendo abuso de autoridad para influir sobre la decisión de otros funcionarios.

Además, si uno mira los pliegos, las licitaciones y los actos administrativos, se hicieron en el fuero provincial de Santa Cruz. Esos actos deben ser criminalizados e invalidados por la justicia provincial y o la Corte Suprema si hay cuestión federal.

Esto que vimos fue un oprobio jurídico. Me preocupa porque de ahí para abajo puede suceder cualquier cosa.

Estoy defendiendo a Cristina. No. Estoy opinando sobre el fallo de un conjunto de jueces sobre las pruebas de un fiscal que no pudo probar que la número uno robó.

En medio de todo esto, absuelven de todos los delitos a Julio De Vido que era el ministro de planificación. A Abel Fatala que era el subsecretario de Obras Públicas y a Héctor Garro, ex titular de Vialidad.

Primero porque no pudieron probar que era una banda dedicada a delinquir. Y como segundo elemento me pregunto: si estos son absueltos, cómo es que la número uno fue condenada.

¿No era una organización perfecta para robar? Si no hay prueba contundente de Cristina hacia Lázaro Baez ¿Cómo es que la condenaron por administración fraudulenta, siendo que son actos provinciales y en todo caso federales con participación necesaria de los antes mencionados?

Todo muy amañado. Tirado de los pelos.

Estoy defendiendo a Cristina. No. Estoy opinando sobre el proceso elegido por nuestra justicia.

Creo que todo esto tiene que quedar bien claro. Cristina fue condenada en una causa que se cae por su propio peso. Ahora casación tiene que darles la razón a los jueces. La misma cámara que tiene vínculos con Macri. Así de limpio es todo esto.

Creo que como periodista responsable, tengo que contarles a todos ustedes los hechos con absoluta rigurosidad. La justicia no puede ser una cuestión de fe. No puede haber meparecismos.

Si hay delitos. Hay que probarlos. No se puede entrelazar y direccionar una causa con la otra y redireccionar las pruebas y menos ocultarlas.