Una instructora sorda les brindó a los niños y las niñas de entre 8 y 11 años herramientas básicas para que puedan comunicarse con sus pares.
En el marco de las distintas actividades que se brindaron durante el desarrollo de las colonias de verano en ocho sedes de la ciudad de Santa Fe, se dictaron talleres de lengua de señas argentina (LSA) a los niños y niñas de entre 8 y 11 años. En los diferentes encuentros, Ivana Nardi, instructora sorda, les brindó conocimientos básicos y les enseñó el abecedario. El objetivo fue que tomen un primer contacto con la LSA y comiencen a comunicarse.
La subdirectora municipal de Accesibilidad y Derechos para las Personas con Discapacidad, Gabriela Bruno, se refirió a estos talleres y destacó: “Se trata de una actividad que se viene desarrollando en las distintas colonias y el objetivo es poder trabajar la accesibilidad comunicacional, brindar algunas herramientas y estrategias para que niños y niñas puedan tener más posibilidades al momento de comunicarse con una compañera o un compañero sordo, que tenga ceguera, o alguna discapacidad intelectual, en definitiva, diferentes situaciones con las que se pueden encontrar y así se puedan comunicar”.
Siguiendo esta línea, la funcionaria contó que primero se trabajó con los y las profesoras y “entendimos que era necesario trabajar con los niños y niñas para que haya una mejor interacción, más fluidez ya sea a través del juego o de diferentes dinámicas que hacen que todo sea más espontáneo”, manifestó.
Más adelante contó que si bien estaba previsto trabajar todo lo relacionado con la perspectiva de discapacidad con los asistentes a las colonias, esta idea surgió a partir de la asistencia de una colona sorda. Así surgió la intención de enfocar más en la parte comunicacional y por eso se convocó a Ivana Nardi, que posee distintas dinámicas para trabajar con los más chicos.
Para cerrar, Bruno destacó el interés de los niños y las niñas: “Se enganchan enseguida, captan esta posibilidad de tener más herramientas para comunicarse. Es increíble la atención que ponen, como enseguida aprenden a formar sus nombres y se interesan por conocer más formas de comunicarse. En todos los casos fue una experiencia muy linda”.
Derribar barreras
En cada uno de los lugares, Ivana Nardi, instructora sorda, les explica a los niños y las niñas las herramientas básicas para comunicarse con una persona sorda. Después les entrega el abecedario y entre todos van repasando letra por letra; y como cierre, forman sus nombres.
“Durante toda la temporada di un taller de lengua de señas a todos los chicos que concurren a las colonias. Me parece que es una buena oportunidad para incluir, para saber que la lengua de señas es una lengua natural de la comunidad sorda, y que la incluye en la comunidad oyente”, destacó con mucha alegría Ivana.
Ante la consulta sobre cómo es la respuesta de los asistentes, dijo: “La respuesta de los chicos es muy buena, aprenden muy rápido, me hacen preguntas que a veces no sé cómo responder y me hicieron aprender muchas cosas a mí también. Me pude relacionar con niños y fue una muy buena experiencia”.
Para cerrar, contó: “En los talleres les enseño lo básico, el abecedario y cómo comunicarse con una persona sorda. Ahora con la pandemia, que todo el mundo use el barbijo, es una barrera que sufrimos para comunicarnos, por eso les doy lo básico para que sepan cómo comunicarse. La experiencia es muy buena, me sirvió mucho a mí y a los niños también porque les interesa”.