La Cancillería mandó a un funcionario de la delegación diplomática en Caracas a la ceremonia en la Asamblea Nacional.
El gobierno de Alberto Fernández participó con el envío de un funcionario de la embajada argentina la toma de control del chavismo de la Asamblea Nacional, después de unas elecciones cuestionadas por la oposición y gobiernos de países occidentales.
El cambio en el legislativo, que ahora preside el exministro y diputado, Jorge Rodríguez, marca una consolidación de poder para el régimen de Nicolás Maduro, que así se aseguró el control del bastión de la oposición que encabeza el presidente interino, Juan Guaidó.
En la Cancillería argentina reconocieron que en la ceremonia participó el ministro Eduardo Canale. Y subrayaron que no asistió Eduardo Porretti, el encargado de negocios que ejerce como principal representante diplomático de la Argentina en Venezuela. “Reconocemos al gobierno de Maduro. No es una novedad, tenemos nuestras críticas, pero lo reconocemos”, dijeron fuentes del Palacio San Martín.
A la ceremonia chavista asistieron representantes de países afines con el régimen venezolano, como Irán, Siria, Cuba, Nicaragua, Turquía, Arabia Saudita, China, Bolivia, Trinidad y Tobago, Egipto, entre otros. La Argentina formó parte de este grupo.
Después de la jura de la directiva del Congreso, Jorge Rodríguez dio un discurso que se centró en cuestionar al parlamento opositor y las sanciones estadounidenses. Es que, con este avance sobre la Asamblea Nacional, Maduro debilita la posición de Juan Guaidó, quien en 2019 fue reconocido por Estados Unidos y decenas países como líder legítimo del país.
La nueva Asamblea Nacional asumió este martes en Venezuela e inauguró sus sesiones con una amplia mayoría de legisladores chavistas, aunque en paralelo la oposición reafirmó la continuidad del anterior Parlamento, que ratificó como legítimo representante del país.
Fuente: La Nación