Lavagna pide cambios y asegura que “no hay tiempo para más excusas”

Lavagna pide cambios y asegura que “no hay tiempo para más excusas”

El ex candidato presidencial y aliado del Gobierno propone reducir costos de la política, los subsidios, no crear más empleo público y modernizar el empleo privado.

Roberto Lavagna, ex ministro de Economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner y ex candidato presidencial el año pasado, publicó un duro documento este sábadoBajo el título “Llegó la hora. No más excusas”, hace un crudo análisis de la situación económica y social y seis propuestas para desarrollar desde el año que viene.

La acumulación de 10 años de estancamiento, incluso retroceso económico y la pandemia, han puesto a los argentinos todos en una difícil encrucijada. El fracaso de las políticas populistas por un lado, o de ajuste por el otro, más la parálisis derivada de la pandemia, han llevado la realidad socioeconómica a niveles insostenibles como lo exponen las cifras de pobreza e indigencia, tanto del INDEC como del Observatorio de la Deuda Social Argentina (de la UCA), arranca el texto que el economista publicó en sus redes sociales.

Lavagna pone el foco en la creación del empleo privado“protegiendo derechos adquiridos pero incorporando a la mayoría que hoy está excluida, sin derecho alguno, a formas modernas de empleo”. Y en apostar a la inversión y a la búsqueda de la productividad.

Además, propone evitar que el empleo público siga creciendo “allí donde no debe” y “penalizar el intervencionismo inútil y burocrático. En definitiva, darle más poder a los ciudadanos y menos a las estructuras, gerenciales, sindicales y a las alianzas espurias entre el Estado y pseudo empresarios”.

Otra de sus propuestas es bajar los costos de funcionamiento del sistema político, y “desarmar progresivamente el sistema de subsidios que privilegia la concentración en Capital y el Gran Buenos Aires”.

Pero también se refiere a las jubilacionesDar equidad al sistema jubilatorio de quienes menos ganan haciendo ajustes diferentes a las jubilaciones y pensiones más altas, de modo de reducir las abismales diferencias que hoy existen entre la mínima y los sistemas de privilegio”.

El ex ministro de Economía adivirtió que habrá resistencias, de políticos, empresarios, sindicalistas, corporaciones de la obra pública, corporaciones de la justicia, medios, intelectuales. Pero también remarca que muchos de estos mismos grupos “hartos del estancamiento, del retroceso en el mundo, de la pobreza creciente, de la desarticulación territorial, serán capaces de ver lo insostenible de la situación en que estamos”.

Y concluye: Muchos de estos cambios los venimos proponiendo desde hace tiempo, pero la sociedad parece aturdida por los gritos de dos modelos que definimos -por consenso- como partes de ‘la grieta’. Para avanzar hay que identificar a quienes ya han sido incapaces, cada uno a su turno, de empezar a revertir el retroceso y encaminarnos hacia la recuperación y el crecimiento.

Fuente: diario Clarín.