Se trata de Edgardo Berli, ex ministro de Obras y Servicios Públicos, y Ricardo Fratti, ex director provincial de Obras Hidráulicas. Recibieron penas de 3 años por “estrago culposo”, pero no irán a prisión.
La trágica inundación de 2003 en la ciudad de Santa Fe dejó secuelas imborrables para todos los habitantes de la capital provincial. El súbito desborde del río Salado a la altura del Jockey Club, afectó a todo el cordón sur-oeste de la ciudad y dejó como saldo 23 muertes por las que todavía se reclama justicia.
Este viernes, se firmó la condena de 3 años para dos ex funcionarios de la administración de Carlos Alberto Reutemann, quien era gobernador de la provincia cuando el agua fue una trampa mortal para muchos santafesinos.
El juez Octavio Silva encontró responsables de “estrago culposo agravado” a Edgardo Berli, ex ministro de Obras y Servicios Públicos de la provincia, y a Ricardo Fratti, ex director provincial de Obras Hidráulicas.
A ambos les dictó una pena de 3 años, de cumplimiento condicional. Eso significa que no irán a prisión de manera efectiva.
En la causa, que se inició el 5 de mayo de 2003, también estaba involucrado el entonces intendente de la capital provincial, Marcelo Álvarez. Sin embargo, falleció el 9 de abril del año pasado tras 15 años sin tener una resolución judicial a favor o en contra.
La tragedia, que está por cumplir 16 años el próximo 29 de abril, dejó 23 muertos (según la cifra oficial) y cerca de 150.000 afectados. Los organismos de derechos humanos y el colectivo de inundados han denunciado que, en los meses posteriores a la catástrofe, por los daños colaterales, murieron en total 157 personas.