Los empresarios del transporte público de pasajeros advirtieron que la ciudad de Santa Fe podría quedarse sin colectivos a partir del 1° de octubre si la Municipalidad no arbitra las medidas para garantizar el funcionamiento del servicio.
En el Concejo Municipal ingresaron en las últimas horas dos proyectos que intentan servir de salvavidas momentáneos para las empresas de transporte por colectivos de la ciudad, quienes advirtieron que, de no recibir algún tipo de ayuda económica, dejarán de presar el servicio desde el 1° de octubre.
Por un lado, los concejales Inés Larriera y Carlos Pereira (Juntos por el Cambio) presentaron una iniciativa para que el dinero recaudado por el municipio en conceptos del boleto estudiantil, estimado en 15 millones, llegue a las empresas.
En tanto, el bloque justicialista a cargo de Juan José Saleme, Jorgelina Mudallel y Federico Fulini solicitó, que el dinero arribe directamente al pago de sueldos de los choferes.
Los fondos serían un aporte que permitirían ganar algo de tiempo hasta encontrar una salida a un negocio que pierde unos 45 millones de pesos mensuales.
Los ediles afirmaron que este año los recursos destinados a financiar el boleto para los estudiantes no serán utilizados, por lo que permitirían brindar algo de alivio a lo que podría ser un inminente paro de transporte.
Según estipula la ordenanza tributaria municipal 12.226, el financiamiento del Fondo para el Boleto Educativo Municipal se desprende de lo recaudado por del cinco por mil (5 por ciento) de la base imponible cobrada a las entidades bancarias.
En las últimas horas, los empresarios del transporte público de pasajeros advirtieron que la ciudad de Santa Fe podría quedarse sin colectivos a partir del 1° de octubre si antes la Municipalidad no arbitra las medidas para garantizar el funcionamiento del servicio. El sector envió una nota al intendente Emilio Jatón para solicitarle la apertura de un canal de diálogo a fin de encontrar soluciones urgentes.