El capitán culé le dijo adiós a su amigo con un sentido mensaje y aprovechó nuevamente para pegarle a la dirigencia: “No te merecías que te echen como lo hicieron. Pero, no me sorprende nada…”.
La tirante relación entre Lionel Messi y el presidente Josep María Bartomeu sigue sumando capítulos. En último se dio tras consumarse la salida de Luis Suárez, tercer máximo goleador histórico de la institución e íntimo amigo, rumbo al Atlético Madrid, uno de los rivales directos en la disputa por la obtención de La Liga de España.
El capitán culé utilizó su cuenta de Instagram para despedir al uruguayo, con quien formó un gran vínculo desde su arribo al club a mediados de 2014. Era habitual verlos de vacaciones juntos y sus parejas incluso tuvieron un negocio juntas. En su posteo, el 10 aprovechó la oportunidad para apuntar contra la dirigencia.
“Ya me venía haciendo la idea pero hoy entré al vestuario y me cayó la ficha de verdad. Que difícil va a ser no seguir compartiendo el día a día con vos, tanto en las canchas como afuera. Los vamos a extrañar muchísimo. Fueron muchos años, muchos mates, comidas, cenas… Muchas cosas que nunca se van a olvidar, todos los días juntos”, comenzó su sentido mensaje el astro argentino.
Sin embargo, con el correr de sus palabras, el tono del mensaje se comenzó a elevar y se cree que el principal destinatario es el presidente Josep María Bartomeu, con quien tiene unas fuertes diferencias desde hace varias temporadas y que quedó en evidencia en las últimas semanas, tras frustrarse su salida del club. El mandatario le advirtió que las únicas maneras posibilidades de marcharse eran o con el pago 700 millones de su cláusula de rescisión o iniciando un juicio.
“Va a ser raro verte con otra camiseta y mucho más enfrentarte. Te merecías que te despidan como lo que sos: uno de los jugadores más importantes de la historia del club, consiguiendo cosas importantes tanto en lo grupal como individualmente. Y no que te echen como lo hicieron. Pero la verdad que a esta altura ya no me sorprende nada”, advirtió Leo.
El delantero de 33 años, que ahora será dirigido por el argentino Diego Simeone, fue operado en una de sus rodillas y se perdió varios partidos de la pasada temporada. No obstante, sus números fueron muy positivos: marcó 21 goles y brindó 12 asistencias en un total de 36 presentaciones.
El Pistolero no fue el único “peso pesado” que debió marcharse tras la llegada del holandés Ronald Koeman como director técnico. Ivan Rakitic regresó a Sevilla y Arturo Vidal recaló en el Inter de Italia.
Luego de frustrarse su desvinculación del Barcelona, Lionel Messi concedió una entrevista en la que fue crítico de Josep María Bartomeu. En esa oportunidad, el futbolista afirmó: “El presidente siempre dijo que yo al final de temporada podía decidir si me quería ir o si me quería quedar, y al final no terminó cumpliendo su palabra”.
“Quería un proyecto ganador y ganar títulos con el club para seguir agrandando la leyenda del Barcelona a nivel de títulos. Y la verdad que hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas”, recalcó Leo, quien considera que los catalanes no realizaron una política acertada en los últimos mercados de pases. Por ejemplo, para reforzar al equipo en esta temporada solamente llegaron Miralem Pjanic, Pedri y Trincao.
Messi, además, recalcó que seguirá vistiendo la camiseta azulgrana (tiene contrato hasta junio de 2021) porque no estaba dispuesto a iniciarle acciones legales al conjunto culé: “Voy a seguir en el club porque el presidente me dijo que la única manera de marcharme era pagar la cláusula de 700 millones. Y que luego había otra manera, que era ir a juicio. Yo no iría a juicio contra el Barça no iría nunca porque es el club que amo, que me dio todo desde que llegué. Es el club de mi vida, tengo hecha aquí mi vida, el Barça me dio todo y yo le di todo, jamás se me pasó por la cabeza llevar al Barça a juicio”.