Fue anunciado por el Ministerio de Economía, ratificando que tanto el IFE como el ATP han ayudado a contener la pobreza.
Tanto el Ingreso Familiar por Emergencia (IFE) como el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) han sido dos herramientas desplegadas por el Gobierno para ayudar a las familias en estos tiempos de crisis pandémica.
Es por eso que, desde el Ministerio de Economía de la Nación, su continuidad fue asegurada siempre que la pandemia “obstaculice las actividades productivas”.
Mercedes D’Alessandro, directora nacional de Economía, Igualdad y Género del Ministerio, dijo que: “El IFE evitó que entre 2,5 millones y 4,5 millones de personas cayeran en la pobreza y la indigencia”.
“Hay un compromiso muy grande del presidente Alberto Fernández de que, mientras tengamos esta situación de emergencia sanitaria y la pandemia esté impidiendo las actividades productivas y el desarrollo de la actividad de las personas, el IFE y el ATP continúe”, expresó la funcionaria en AM 750.
Como ella misma expresó en un tweet bromeando, todo lo que aportará al Ministerio “tendrá perspectiva de género”. En ese sentido, D’Alessandro aseguró que las trabajadoras de casas particulares es uno de los grupos que “más le interesa” que perciban el IFE.
Lo cierto es que es la primera opción laboral que tienen las mujeres en la Argentina. Si mirás de qué trabajan las argentinas, la principal ocupación es ser empleada doméstica y además es el trabajo más precario con menos salario. Ahí tenemos un desafío muy grande.
