Un joven de 30 años se recupera en una clínica luego de quedar en terapia intensiva por una complicación en sus pulmones generada por el vapeo.
Un joven se recupera en una clínica porteña tras quedar internado en terapia intensiva con asistencia respiratoria debido a una complicación pulmonar grave asociada con el uso del cigarrillo electrónico. Recién este fin de semana, pudo volver a empezar a comer por su cuenta.
El paciente, de 30 años, había fumado cigarrillos comunes durante 15 años. Hace siete meses, quiso dejarlos y optó por empezar a vapear con un dispositivo electrónico. Pero en los últimos tres meses empezó a tener cada vez más dificultad para respirar. “Cada vez que daba una pitada, se sentía cada vez peor, que le quemaba el tórax”, contó la médica tratante, Roxana Berenguer, neumonóloga y broncoscopista.
Leer Más ► El 7% de los adolescentes argentinos consume cigarrillos electrónicos
Los resultados de los estudios revelaron que padece proteinosis alveolar pulmonar, una afección que se produce por la acumulación de proteínas y lípidos en los alvéolos de los pulmones. Aunque no es una enfermedad nueva, es la primera vez que se detecta asociada con el consumo del cigarrillo electrónico, un dispositivo que está prohibido en el país por las autoridades regulatorias.
En los Estados Unidos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, investigan un brote con 1479 casos y 33 muertes de lo que, hace menos de dos semanas, definieron como enfermedad pulmonar asociada con el uso del cigarrillo electrónico o el vapeo.
Muchos casos en E.E.U.U
Los síntomas son dificultad para respirar (disnea), tos, dolor de pecho y otros signos del síndrome de distrés respiratorio. Los diagnósticos, a diferencia del caso argentino, son neumonías.
Según la información del caso local a la que pudo acceder el diario La Nación, el joven decidió consultar por esos síntomas en una clínica porteña con cobertura de su obra social. Inmediatamente, quedó internado en terapia intensiva con asistencia respiratoria.
Al día siguiente, Berenguer le hizo una broncoscopía y, durante la consulta, el paciente comentó que había empezado a usar cigarrillo electrónico con un líquido de origen italiano (Liqua) que contiene saborizantes y nicotina para imitar distintos tipos de tabaco.