Por Martín Sperati
La primera conclusión que tenemos luego del término de la campaña electoral para estas PASO del domingo es que esto así como está, no sirve.
Hay que decirlo y ponerlo en tema de análisis para, de algún modo, valorizar la democracia. Esta democracia que hay que atesorarla y cuidarla todos los días.
Las internas así como están no sirven: es plata, recursos y esfuerzos que se gastan inútilmente. El objetivo de las PASO es que cada partido defina candidato. En este caso no ocurre.
Pasadas las elecciones algunas cosas deberían cambiar y corregir en la política. Estamos claros que necesitamos de la buena política. Esa política que conecte los problemas con la solución, no de la pantomima.
Lo que debería decir la ley es: en aquellos lugares y circunstancias en los que hay dos o tres candidatos, que haya PASO.
Porque además lo que ha dejado este proceso es producto de una voluntad, no de una casualidad. Nadie ha querido tener internas. Si hay voluntad de no tenerlas, ¿para qué hacerlas?, si además no aporta nada.
Qué bueno sería que la política dijera: “En este caso, fracasamos”. Sería un primer elemento de cordura que la dirigencia política pudiese decir “vamos a terminar con esto que no sirve para nada”. Que complica a la argentina y que además cuesta plata, en un país donde no sobra.
La argentina está sumergida en una crisis brutal desde hace un tiempo a esta parte y necesitamos gestos para sacar adelante este país, entre ellos, quitar esta pantomima.
No hay que mantener cosas que representan una ficción. Porque los candidatos a Presidente que van a emerger el próximo domingo son los candidatos que hoy ya están.
