La empresa de recolección de residuos rescindió su contrato con el Municipio por una deuda de 306 millones de pesos.
Cliba, la empresa de recolección de residuos, rescindió su contrato con la Municipalidad de Santa Fe a raíz de una deuda de 306 millones de pesos.
Esta decisión ha generado gran revuelo e incertidumbre por la gran cantidad de puestos de trabajo que se perderían si la medida se hace efectiva: la empresa emplea a más de 400 personas entre barrenderos, recolectores, choferes y empleados administrativos.
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El Sindicato de Conductores de Camiones emitieron un comunicado solicitando la intervención del Ministerio de Trabajo de Santa Fe para discutir la continuidad laboral de los trabajadores.
“Nosotros no nos vamos. Nosotros nos quedamos a luchar por nuestras fuentes de trabajo“, reza el comunicado.
Al final del escrito el Sindicato también anuncia que se realizará una conferencia de prensa para informar sobre las acciones legales y gremiales a seguir.
En el mes de septiembre, la firma ya analizaba rescindir su contrato con la Municipalidad de Santa Fe.
En ese entonces, a pesar de las múltiples advertencias de la empresa, el municipio no hizo frente al pago de la deuda. La fecha límite para resolver la situación era el 21 de octubre.
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