Además, la carga tributaria legal en Argentina sobre la producción y comercialización formal de los alimentos es del orden de 40% del precio de venta final
Un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) dejó en manifiesto que la carga tributaria legal en Argentina sobre la producción y comercialización formal de los alimentos es del orden de 40% del precio de venta final mientras que, para el caso de las bebidas gaseosas, el componente impositivo asciende a casi 50%. El estudio realiza una investigación minuciosa por toda la cadena de valor de los productos.
El informe señaló que en la comparación internacional con otros países de la región, la incidencia total del sistema tributario sobre el precio de venta al público es superior al resto, debido principalmente a los tributos subnacionales que afectan a la actividad económica.
En el caso de las gaseosas, Argentina posee una presión tributaria de 49,5%, 6,5 puntos superior a Uruguay, el segundo país con más presión (43%) y 21,5% superior a Paraguay, el menor de la muestra con 28,5%.
En los alimentos, el Iaraf explica que cuando un consumidor compra una lata de arvejas, el 43,4% de lo pagado se va en impuestos. Los impuestos que más inciden son el IVA, que se lleva 17,4% del precio final, seguido por la Seguridad Social (8,5%), Ingresos Brutos (8,1%) y el Impuesto a las Ganancias (4,3%).
Para el instituto, en las últimas dos décadas la presión tributaria ha crecido de forma sostenida.
